El Gobierno de Estados Unidos anunció una decisión significativa que afecta a miles de inmigrantes con residencia legal en el país: se llevará a cabo una “reexaminación rigurosa y a gran escala” de todas las Tarjetas Verdes (Green Cards) emitidas a migrantes provenientes de los llamados “países de preocupación”.
Alcance de la Nueva Medida
La orden fue emitida por el director del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), Joseph B. Edlow, y representa un endurecimiento de la política migratoria. La revisión abarca a todos los extranjeros que hayan obtenido la Tarjeta de Residente Permanente y provengan de naciones designadas por las autoridades.
Aunque el USCIS no ha detallado públicamente la lista completa de “países de preocupación”, la información disponible indica que la revisión incluye a ciudadanos de 19 naciones, entre ellas:
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Cuba
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Venezuela
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Afganistán
Síntesis de la Trayectoria
Esta medida se enmarca en una tendencia histórica de endurecimiento de las políticas migratorias de Estados Unidos, impulsada por preocupaciones de seguridad nacional. La decisión de revisar todas las green cards de estos países se produce inmediatamente después de un tiroteo ocurrido cerca de la Casa Blanca, donde dos agentes de la Guardia Nacional resultaron heridos por un ciudadano afgano que había ingresado al país en 2021 a través del programa “Operación Aliados Bienvenidos”.
El historial de esta administración en materia migratoria incluye la prohibición de entrada a ciudadanos de varias naciones y la priorización de la seguridad en el proceso de asilo y reasentamiento. Esta nueva orden subraya el compromiso de las autoridades con una “revisión exhaustiva” de la documentación migratoria, con un enfoque en la protección interna.
Comentarios de las Autoridades
El director del USCIS, Joseph B. Edlow, justificó la medida con un claro mensaje sobre las prioridades de la administración:
“La protección de este país y del pueblo estadounidense sigue siendo primordial, y el pueblo estadounidense no cargará con el costo de las imprudentes políticas de reasentamiento de la anterior administración. La seguridad estadounidense no es negociable”.
En este sentido, el anuncio se presenta como una respuesta directa a los recientes incidentes de seguridad, calificando el tiroteo como un “acto de odio” y prometiendo endurecer las medidas migratorias contra quienes pongan en riesgo la seguridad nacional.
