Por: Záyin Dáleth Villavicencio
Twitter: @ZayinDaleth3_0
En lo que fue el quinto día consecutivo de movilizaciones y bloqueos, miembros de la Organización de Normales Oficiales del estado de Michoacán (ONOEM), retuvieron siete vehículos comerciales y saquearon los productos que transportaban para repartirlos entre los ciudadanos que transitaban frente a Palacio de Gobierno.
Pan, refresco, leche y agua embotellada, entre otros víveres, fueron los repartidos a los morelianos, que ante la oferta de los estudiantes se arrebataban de las manos los productos. Los jóvenes normalistas advirtieron que si no reciben una garantía de parte del gobierno del estado para la resolución de sus demandas –las claves permanentes para los normalistas egresados–, no liberarán las unidades retenidas en las escuelas normales de Cherán y Tiripetío.
Previamente a este escenario, representantes de distintas escuelas sostuvieron un dialogo con Alejandro García, asesor de la Secretaría de Gobierno, que al culminar sin éxito llevó a la retención de tres de las siete unidades comerciales y una marcha por el Centro Histórico, con la advertencia de que las jornadas de lucha continuarán en los próximos días.
Durante el dialogo que sostuvieron la parte oficial y los manifestantes, el representante de Gobierno pidió la liberación de los vehículos retenidos, entre ellos los que mantienen en las inmediaciones de la Escuela Normal Rural Vasco de Quiroga, a cambio de una audiencia con el titular de la Secretaría de Educación estatal, Jesús Sierra Arias, así como con el subsecretario de Gobierno, Fernando Cano Ochoa.
Y es que, aseguró Alejandro García, “la retención de los autobuses no es una cuestión de negociación, no debemos presionarnos de ambos lados. El gobierno del estado no puede ser condicionado de esta forma”, quien puntualizó que en el secuestro de las unidades prevalece un delito y tendrá que actuarse en consecuencia.
El funcionario dijo que lo que mantiene obstaculizada la resolución del conflicto es la exigencia de los estudiantes para que se firme un documento como garantía de las plazas automáticas: “la invitación al dialogo sigue en pie una vez que entreguen las unidades, ya que la postura del gobierno es muy clara. No podemos iniciar un dialogo bajo presión, con estas unidades retenidas”.
Asimismo, afirmó que la Procuraduría General de Justicia en el Estado (PGJE), será la instancia que determine “perseguir el delito” y la que decida implementar algún operativo para recuperar las unidades de transporte”, aunque señaló que la instrucción es seguir agotando el dialogo.
No hay disposición de solución: normalistas
Los miembros de la ONOEM respondieron al intermediario de la Secretaria Gobierno que la parte oficial debe recibir el borrador propuesto por la Organización de Normales –en el que se incluye la cantidad de plazas automáticas que se habrán de entregar– antes de que se liberen los vehículos.
Lamentaron tener que aumentar de tono sus protestas para ser escuchados: “Necesitamos ejercer para bien o para mal este tipo de presión, porque de no ser así no somos escuchados”. Aseguraron que saben que de parte del gobierno estatal no hay disposición de solucionar el conflicto.
Padres de familia reiteran respaldo
En conferencia de prensa, varios padres de familia agrupados en la Normal Vasco de Quiroga advirtieron que son ya unos 500 las madres y padres que se han concentrado en respaldo a la lucha que mantienen las ocho normales oficiales del estado, en busca de sus plazas automáticas.
César, padre de uno de los normalistas de Tiripetío, aseguró que reciben además el apoyo de distintas comunidades del estado y de la meseta purépecha, dispuestos a resistir ante un posible nuevo operativo policíaco como el que se registró el pasado 15 de octubre en la misma institución. Previno que esta vez existen familias enteras con mujeres y niños dentro de la escuela.
El padre de familia indicó que las movilizaciones no liberarán las vías del tren hasta que se dé una solución pacífica y recordó que “Son nuestros hijos y estamos aquí dándoles nuestro respaldo, estamos aquí padres de familia, mujeres y niños y responsabilizamos al gobierno en todos sus niveles de lo que pueda ocurrir ante un nuevo intento de desalojo”.
Por su parte, Teresa Rivas, madre de dos normalistas, informó que ante cualquier posible acto de “represión”, familiares de los estudiantes suscribieron una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), responsabilizando al gobierno del estado por cualquier hecho que se pueda suscitar.
Cabe señalar que los estudiantes se han sumado a las manifestaciones de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en rechazo a la reforma educativa, así como al paro indefinido que estalló desde el pasado lunes en Michoacán.