Para poder sobrevivir al vertiginoso ritmo de la vida en la actualidad el cerebro, que puede trabajar a dos niveles de profundidad, activa el más superficial, el piloto automático.
Los estudiantes de Harvard, universidad americana que acoge a algunos de los alumnos más brillantes del mundo, aceptaron el reto ideado por Bite Size Psych, en el que a partir del Test de Reflejos Cognitivos planteado por Shane Frederick, profesor de la Universidad de Yale, formula un secillo acertijo a algunas de las personas más inteligentes. Y la mitad de ellos no consigue resolverlo.
«Un bate y una bola bola cuestan 1,10 dólares. El bate cuesta un dólar más que la bola. Así que, ¿cuánto cuesta la bola?».
Responder que la bola cuesta 10 céntimos sería la respuesta instintita, como explican en el vídeo, pero no la correcta. La solución es la mitad, 5 céntimos.
Esta es la primera pregunta trampa del Test de Reflejos Cognitivos, que consta solamente de tres más. «El profesor Frederick encontró el modo de medir cómo las personas suprimen su reacción inicial a favor de una respuesta más pensada». Vamos, un argumento bastante común para justificar por qué alguien ha suspendido un examen, ¿no?
Más o menos inteligentes, pero todos preferimos la vía rápida, como demuestra el TRC que probaron con 3500 personas, la mayoría de ellos universitarios. Tan solo el 17% de los «examinados» respondió correctamente a las tres preguntas. «Esto es preocupante, porque estudios anteriores advierten de que cuanto peor es el resultado en este test, más propensa es la persona a cometer errores cognitivos», asegura el vídeo de Bite Size Psych.
Pero tranquilos, nuestra forma de afrontar estos acertijos no tiene toda la culpa. Si la letra con la que se plantean estos problemas es más grande,aumentan un 65% las posibilidades de responder correctamente.
Pero, ¿por qué la mayoría respondería 10 céntimos a la pregunta del bate y la bola? Porque de los dos diferentes sistemas de pensamiento que posee el ser humano, empleamos el rápido, el intuitivo, el que requiere menos esfuerzo. Es también el mecanismo que empleamos para responder cuánto suman uno más uno.
En cambio, el otro método es más lento, analítico y requiere más trabajo, ysolo se emplea cuando te concentras de verdad. Para utilizar este segundo sistema se recomienda cambiar el tipo de letra a una más ilegible, porque cuanto más difícil resulte la lectura, más concentración pondremos en ella y, por tanto, el resultado será mejor.