Daniela Santoyo/ @danni_gs
(24 de septiembre, 2013).- En el marco de la aprobación del proyecto de ley S.744 que plantea reformar las leyes de inmigración en Estados Unidos, el grupo Campaña por Una Moratoria a las Deportaciones realiza talleres informativos al respecto en Chicago, con el objetivo de que los inmigrantes conozcan cuál es el panorama que les espera.
En junio pasado, el Senado estadounidense aprobó, con 68 votos a favor y 32 en contra, el “Proyecto de Ley para la Seguridad Fronteriza Oportunidades Económicas y Modernización Migratoria de 2013”, iniciativa que supone regularizar el estatus de residencia y laboral de 11 millones de indocumentados.
El domingo pasado, el grupo Campaña realizó un taller llamado “¿Qué onda con la Reforma Migratoria?” al que asistieron varios inmigrantes, incluidos mexicanos. Entre estos últimos se encontraba Carlos Rodríguez, quien opinó que “tenía mucha información de lo que decían en las noticias, en la tele, pero en este taller educativo me dieron un punto de vista totalmente diferente”.
Agregó que “no es una reforma migratoria justa porque las personas que no serán elegibles para esta reforma serán más marginalizadas. Es injusto porque son personas igual de productivas que las que sí califiquen”.
El procesamiento de regularización a millones de inmigrantes indocumentados sólo será para aquéllos que no tengan antecedentes penales, aprendan a hablar inglés, paguen una multa por violar las leyes migratorias cuando ingresaron a Estados Unidos y cubran los costos de sus casos y adeudos en el pago de impuestos, dependiendo de sus fechas de inicio de labor.
Actualmente la propuesta se encuentra frenada en la Cámara de Representantes, donde, sobre todo, algunos representantes republicanos afirman que no se dejarán manipular por lo aprobado en el Senado aunque exista la enmienda relativa a la Seguridad Fronteriza.
En temas de seguridad, el proyecto plantea la construcción de otros mil 126 kilómetros de muro en la frontera con México, así como la contratación de 20 mil agentes más para la Patrulla Fronteriza y el sobrevuelo de 18 aviones manejados a control remoto, equipados con radares y cámaras.
Otro de los asistentes fue Gerardo Calvillo, voluntario en la organización Communities United Against Foreclosure and Eviction (Comunidades Unidas contra los Desahucios), quien dijo haber leído varias partes del proyecto de reforma migratoria y buscado información por Internet, y mencionó: “no estoy de acuerdo con todo, pero me gustaría informarme; siempre hay que educarse un poquito más”.
Durante el taller, José Herrera, coordinador de la Campaña por Una Moratoria a las Deportaciones y otros integrantes de la misma hablaron sobre la militarización en la frontera, así como de los mitos, mentiras y verdades sobre la reforma y las implicaciones al obtener el estatus de Inmigrante Provisional Registrado (RPI, por sus siglas en inglés).
“El gobierno dice que lo máximo que podrían calificar serían 4 de los 11 millones de indocumentados; pero nosotros pensamos que va a ser tal vez mucho menos, teniendo en cuenta que hay que cumplir con todos los requisitos” mencionó Erin Raether, integrante de la Campaña.
En los foros se hizo énfasis en que, en caso de aprobarse y obtener el registro, esto no garantizará la permanencia de los inmigrantes en el país. Herrera aseguró que “el llegar a obtener ese estatus de RPI nos hace muy vulnerables porque por cualquier cosa te lo pueden quitar, te lo pueden revocar. Y los que no califiquen, no van a poder seguir en sus empleos”.
También mencionó que, aunque tienen diferentes perspectivas, ellos pretenden informar sobre aquello que no se dice en los medios de comunicación y que no están haciendo público los políticos. En cuanto a sus acciones en relación con otras organizaciones, sostuvo: “Nuestra forma de organizar es totalmente diferente, nosotros educamos a la gente. No queremos caer en aceptar cualquier cosa que nos den, buscamos concientizar al pueblo a que sea crítico”.
(Con información de Proceso y La Raza).