(12 de junio, 2014).- “Si no tenemos derechos, no habrá copa” es la consigna bajo la que marcharon hoy cientos de brasileños inconformes a las afueras de la Arena Corinthians en Sao Paulo, durante el marco de la inauguración del mundial Brasil 2014.
La policía militar brasileña respondió con gases lacrimógenos a los manifestantes en las inmediaciones del estadio inaugural y también dispersó a las docenas de inconformes con balas de goma y bombas de estruendo.
Los manifestantes antimundial, que buscaron afectar la llegada de aficionados al estadio de Corinthians, culpaban a su gobierno por el mal manejo de recursos y el excesivo gasto para organizar la Copa del Mundo en vez de invertir ese dinero para la infraestructura del país. “No queremos copa, sabemos que no la detendremos pero todos los brasileños debemos de unirnos en las protestas”, declaró un estudiante inconforme.
Los inconformes mencionaron que en su país, todos son amantes del futbol pero en este momento no querían la Copa y ponen por encima su estabilidad social antes que un mundial.
Durante las protestas también se registraron agresiones a dos periodistas de nacionalidad estadounidense, Bárbara Arvanitidis, productora del canal norteamericano CNN, resultó herida cuando la esquirla de una bomba de estruendo la impactó en el brazo izquierdo. La enviada especial de la cadena CNN fue atendida de inmediato por los servicios médicos y sólo presentaba una laceración.
Shasta Darlington, corresponsal de CNN en Brasil, también resulto levemente lesionada después de los enfrentamientos registrados entre la policía militar y los manifestantes antimundial en las inmediaciones de la Arena Corinthians, y sólo presentaba rasguños después de sufrir una caída en medio de la revuelta.
Rio de Janeiro, otra de las principales sedes de la Copa del Mundo, también registró manifestaciones en contra del mundial de Brasil 2014. Estudiantes y profesores encabezaron las manifestaciones y principalmente pedían mejoras en la educación, cultura y salud brasileña.
Al contrario de la protesta reprimida violentamente en Sao Paulo, los manifestantes de Rio de Janeiro portaban banderas, pancartas y acompañaron su movimiento por las calles con música típica brasileña, y de esta forma también pidieron diálogo en la negociación salarial.
Aunque la mayoría de manifestantes en Río de Janeiro se declararon en contra de la Copa del Mundo, otro sector de aficionados mostró todo su apoyo a la justa mundialista.
Foto: AP