Al menos 120 mil personas se han visto obligadas a desplazarse desde principios de octubre en las regiones sirias de Alepo, Hama e Idlib, dijo el lunes Naciones Unidas, lo que supone más del doble de una primera estimación en 50 mil.
La mayoría de las personas que ha huido de los crecientes combates han emigrado dentro de la misma región, a ciudades o pueblos cercanos de sus lugares de origen, o a campamentos situados cerca de la frontera turca, dijo Vanessa Huguenin, portavoz de la oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios.
“Principalmente necesitan tiendas de campaña, objetos domésticos básicos, agua, comida y servicios sanitarios”, agregó.