Un grupo de científicos de la Facultad de Ciencias de la UNAM se encuentran desarrollando un biosensor que funcione como prueba de detección rápida, masiva y barata del SARS-CoV-2 (COVID-19).
De acuerdo con la Facultad, esta iniciativa se realiza a partir del trabajo que investigadores del Laboratorio Nacional de Soluciones Biomiméticas para Diagnóstico y Terapia (Lansbiodyt), mismos que por más de cuatro años elaboran un sensor versátil de biomoléculas para detectar diversos anticuerpos y moléculas como glucosa e insulina por el cual se podrá diagnosticar diabetes-, colesterol, triglicéridos, entre otros.
Asimismo destacó que la versatilidad del sensor ha permitido, ante la actual contingencia sanitaria, enfocarlo a la detección del SARS-CoV-2 de forma económica, rápida y segura y sin necesidad de utilizar los instrumentos y los elevados costos que utilizan otras pruebas como el PCR (pruebas de reacción en cadena de la transcriptasa inversa-polimerasa).
“Implementamos la técnica para detectar en RNA (ácido ribonucleico), lo cual nos permitiría tener una gran especificidad en lo que estamos detectando, pero el desarrollo del sensor permite que sea masivo. Entonces, la idea es combinar dos necesidades: especificidad y masividad, para poder salir adelante en el diagnóstico”, detalló Tatiana Fiordelisio, una de las líderes del proyecto.
Destacó que las pruebas rápidas detectan la cantidad de anticuerpos, es decir, diagnostican en etapas más avanzadas una infección cuando el paciente ya desarrolló anticuerpos, sin embargo no detectan al virus ni al material genético, en cambio con el método del biosensor realizado por la científicos de la UNAM, se hace una detección específica del virus, con una carga viral menor, lo que significa contar con un diagnóstico rápido y oportuno.
“Nosotros lo que hicimos es tratar de combinar la especificidad que te da un PCR, pero que no tiene ese potencial de masividad de una prueba serológica, combinarla en un sensor que nos permitiera tener especificidad porque lo que detecta es el material genético viral, detecta al virus, pero en ciertas condiciones experimentales que pueden ser masivas”, explicó Fiordelisio.
“Un sensor que tenga la especificidad, pero que sea de fácil uso, fácil acceso, barato, que se pueda llevar a todos lados, a lugares donde no haya hospitales ni laboratorios clínicos”. agrego
Este proyecto actualmente se encuentra en la fase de validación ante el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (Indre) y en pruebas de distintos tipos de lectores para determinar cuánta carga viral se podrá detectar.
Ante la emergencia de salud que se vive en todo el mundo, científicos de nuestra Facultad trabajan en un biosensor detección #Covid-19 ? https://t.co/HAVblkMsC8 #OrgulloCiencias #PasaEnCiencias #OrgulloUNAM #UNAMosAccionesContraCovid19 pic.twitter.com/5089up3cNg
— Facultad de Ciencias (@fciencias) April 15, 2020
El objetivo es que en las próximas semanas los hospitales y laboratorios logren realizar hasta 43 pruebas por placa y con un tiempo máximo de una hora y media, sin necesidad de tener lectores, infraestructura ni máquinas sofisticadas.
“No se van a usar kits de insumos ni reactivos que se necesitan para PCR y que ya no hay a nivel mundial porque ya somos de los últimos países y eso perjudica mucho el número de pruebas que se van a poder hacer aquí porque no hay disponibilidad, además de que el costo de esos kits es elevado”, sostuvó Mathieu Hautefeuille, líder del proyecto.
Explicaron que a partir de una muestra tomada de la nariz o de la boca, se colocaría en una solución de trisol, una solución comercial compuesta por cloroformo y otros solventes. Una vez colocada la muestra el virus quedaría inactivado, lo cual es una gran ventaja debido a que la muestra puede ser transportada a cualquier otra parte sin que haya un peligro de contagio.
La Facultad de Ciencias destacó que el equipo de estudiantes y profesores del Lansbiodyt trabaja desde el mes de marzo en este esfuerzo a contratiempo, por lo cual la mayoría dejó sus trabajos en pausa para dedicarse de lleno a dar soluciones a la emergencia sanitaria.
“Reunimos a todo el laboratorio y todos quisieron entrar; son 28 personas de todos niveles: estudiantes, posdoc e investigadores, además de los colaboradores de otros institutos, institutos nacionales, de hospitales, que nos apoyan a revisar; hay mucha gente atrás de esto.
“Son 28 personas que están desde las 6:30 de la mañana hasta las 3:00 de la mañana del día siguiente todos los días”, comentó Mathieu Hautefeuille.
Cabe destacar que los participantes del proyecto son estudiantes y académicos sin paga, con el único propósito de que su trabajo como científicos sirva y que pueda aportar algo al país.
Se calcula que tendrá un costo de alrededor de los 300 pesos por prueba, a diferencia de los mil 500 a dos mil pesos a que ascienden otras pruebas de diagnóstico.
Les prometimos más info sobre el biosensor, aquí tienen:https://t.co/Nz0BiJogKa
— LaNSBioDyT (@LaNSBioDyT) April 15, 2020