Ayer, Grupo Imagen despidió a cerca de 400 personas sin justificación alguna. El inesperado recorte le pegó al área de radio, televisión y editorial. Al menos así lo han asegurado decenas de extrabajadores y fuentes consultadas por Revolución TRESPUNTOCERO.
Algunos testimonios aseguran que Excélsior fue de los medios pertenecientes al corporativo más dañados. Sin embargo, Pascal del Río -su director- ni siquiera se presentó a explicar el hecho. Y, en su lugar quien hizo “el trabajo sucio” fue Fabiola Guarneros, subdirectora editorial, quien les manifestó insensiblemente que desconocía la causa del despido, pero sí que la empresa “prescindía de sus servicios”.
Lic. @OlegarioVazquez Solo para notificarle que ayer el departamento jurídico de Grupo Imagen hizo un despido masivo de empleados de la empresa, con flagrantes violaciones a la Ley Federal del Trabajo e incluso deteniéndoles su pago obligatorio de aguinaldo, obligándonos a firmar
— Carlos Meraz (@cmerazd) 20 de diciembre de 2018
Mediante su cuenta de Twitter, ex empleados denunciaron que el Grupo Imagen:
“Hizo un despido masivo de empleados de la empresa, con flagrantes violaciones a la Ley Federal del Trabajo e incluso deteniéndoles su pago obligatorio de aguinaldo, obligándonos a firmar como renuncia “voluntaria” con un finiquito cuando en realidad es una liquidación. Eso no puede ser en una empresa donde deben imperar las ideas, no las imposiciones. Ojalá pueda intervenir en ello y se nos liquide en los términos que la ley establece y así volver a creer en la casa editorial que refundamos hace 12 años, como periodistas profesionales y no como peones”.
Otro usuario, explica:
El mismo día que la subdirectora editorial del periódico Excélsior publicó esta nota en su tuiter, Grupo Imagen y el periódico Excélsior despidieron a unos 400 trabajadores usando prácticamente la misma estrategia. https://t.co/Fr4BjmzZLi
— judo (@judoley) 20 de diciembre de 2018
En otro tuit se lee:
Y la pesadilla se hizo realidad: despido de 400 trabajadores en Grupo Imagen. Los afectados: siempre la primera fila de medios de comunicación: reporteros, fotos, camarógrafos, editores etc etc… Lamentable la postura de los altos mandos en estas empresas. #NoMásDespidos
— Daniel Flores✒? (@Daniel_17flores) 20 de diciembre de 2018
Y otro más:
Ojo @LuisaAlcalde: 80 periodistas quieren ser defraudadas por la empresa Imagen. Con engaños piden firmar su renuncia para no pagar aguinaldos y antigüedad. Algo inmundo. @julioastillero pic.twitter.com/fxg8VUUgTj
— Alejandro Meléndez (@alexmelon) 20 de diciembre de 2018
Hilarantes y contradictorias resultan las palabras que el propio Pascal del Río escribe hoy en su columna para Excélsior -medio del cual es director- criticando a López Obrador por “recortar” varias plazas del sector público del país.
“En una escena de la película Invictus, Nelson Mandela, que acababa de tomar posesión e instalarse en su oficina, se entera que buena parte de los empleados de la Presidencia de la República –todos ellos blancos– está haciendo cajas, esperando que los despidan. El mandatario, interpretado por Morgan Freeman, va hasta su lugar y les dice que si sienten que no pueden colaborar con su gobierno, tienen razón en irse, pero que él los invita a quedarse. La forma grosera en que han sido despedidos centenares de empleados del gobierno federal –como se relata en el trabajo periodístico de mi compañera Claudia Solera– es exactamente lo opuesto a lo hecho por Mandela.
Incluso, por la tarde compartió el despido injustificado de trabajadores del SAT. Situación que de inmediato levantó críticas:
El “cambio”. https://t.co/qlbyCQPnrG
— Pascal BeltrandelRio (@beltrandelrio) 20 de diciembre de 2018
Como cereza en el pastel, hoy, en redes sociales, Excélsior comenzó a solicitar a personas para realizar sus practicas profesionales:
Ayer despidieron a un buen número de periodistas de Grupo Imagen, incluida el área digital. Y hoy lanzan esto. Hola, precarización del trabajo periodístico. La familia Vázquez Aldir no le pierde pic.twitter.com/Wk0vPEL1p0
— Rafael Cabrera (@raflescabrera) 20 de diciembre de 2018
¿Dónde está, entonces, la congruencia periodística?