Alina Rosas Duarte / @ARD3_0
(08 de octubre, 2013).- No se ha cumplido un año desde la toma de protesta de Enrique Peña Nieto en el recinto de San Lázaro y los abusos de autoridad, los excesos policiales y la impunidad con la que estos hechos se han manejado parecen ya ser una marca del gobierno tricolor.
En cada manifestación desde el arribo del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a Los Pinos, ha habido heridos, detenciones arbitrarias e irregularidades en los procesos judiciales.
Desde el primero de diciembre de 2012, el uso de balas de goma –que se encuentra prohibido en la Unión Europea– estuvo presente en lo que muchos denominaron “la batalla de San Lázaro”.
Aquel día, denominado en las redes #1DMx, hubo decenas de heridos por balas de goma que posteriormente las autoridades negaron haber usado. Francisco Kuykendall, director de teatro y adherente a la Sexta Declaración de la Selva Lacandona, resultó víctima de una de las balas que, a través del cerco de más de dos metros de altura que rodeaba el recinto de San Lázaro, fue disparada para herirlo y dejarle una lesión grave e irreversible en el cráneo.
En aquella ocasión, REVOLUCION TRESPUNTOCERO difundió la agresión hacia Kuykendall a través de un video en donde se puede ver el momento en el que éste cae herido luego de que un proyectil es disparado por un policía a escasos tres metros de distancia.
Cabe destacar que el video fue realizado por Teodulfo Torres, a quien REVOLUCION TRESPUNTOCERO entrevistó aquel día y señaló que apenas comenzó a grabar los sucesos alrededor de San Lázaro, su compañero cayó herido al suelo.
Sin embargo, Teodulfo Torres actualmente se encuentra desaparecido, el día en que debió declarar sobre lo ocurrido a su compañero Kuykendall, no llegó.
La familia de Kuykendall presentó en marzo pasado ante la Procuraduría General de la República una denuncia de hechos constitutivos de delitos en contra de Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación; Manuel Mondragón y Kalb, Comisionado Nacional de Seguridad, y contra los policías federales que resulten responsables de haber disparado las armas de fuego que hirieron a Juan Francisco Kuykendall.
Eva Palma, esposa de Kuykendall, ha señalado en varias ocasiones que la atención a su esposo en la Cruz Roja, en el Hospital Siglo XXI, en Magdalena de las Salinas y otras clínicas, donde ha sido sometido a cirugías de cráneo y a diversos tratamientos, ha sido insuficiente y, en la mayoría de los casos, presenta irregularidades.
Palma denunció en marzo pasado que, no obstante el estado delicado en el que se encuentra su esposo, la doctora Maura Loyola García del Hospital Siglo XXI, le insistió y presionó para que Kuykendall fuera trasladado a su casa sin que ella cuente con los medios necesarios para su atención.
A estas irregularidades se sumó otra el pasado 19 de septiembre, cuando Eva Palma informó que en el Hospital Número 30 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Kuykendall tuvo siete convulsiones en un lapso de cuatro horas y la atención neurológica le fue negada, más grave aún, se buscó darlo de alta.
Eva Palma declaró en entrevista con REVOLUCION TRESPUNTOCERO que Kuykendall se encuentra estable y se ha logrado detener, al menos momentáneamente, las infecciones que presenta en los pulmones y en las vías urinarias.
El día de hoy, informó Palma, el director del Hospital 30 del Instituto Mexicano del Seguro Social visitó a Kuykendall. El funcionario declaró que el día de mañana Kuykendall será trasladado al Hospital de Rehabilitación para evaluar su mejora y poder ser dado de alta para seguir en tratamiento desde su hogar.
En materia jurídica, la esposa de Kuykendall mencionó que diez meses después de la agresión, no ha habido respuesta gubernamental alguna hacia los familiares. Aun cuando se ha señalado directamente como responsables a Miguel Ángel Osorio Chong y a Manuel Mondragón y Kalb, ninguno de ellos ha dado respuesta.
