Los avances en la ciencia y la tecnología han hecho que esta tortuga tenga una nueva oportunidad de vivir gracias a su nuevo caparazón creado en una impresora 3D, así como a otros miles de animales que han caído en las garras del maltrato o que han nacido con malformaciones.
Un claro ejemplo de ello es el de esta tortuga, que luego de quedar atrapada en un incendio forestal, perdió su “casa rodante” ósea, su caparazón, sin embargo gracias al avance de la tecnología, un grupo de creativos se dieron a la tarea de usar una impresora en 3D para crearle uno nuevo.
Si bien el caso data del 2016, en redes se ha vuelto a viralizar por el tema de los incendios en Australia y diferentes regiones del mundo, que han afectado a millones de animales de diferentes especies.
El caso de esta tortuga no solo destaca por la creación de su nuevo caparazón, sino porque éste también fue pintado como era originalmente, pues así el reptil puede camuflarse de sus depredadores.
Este precedente ha hecho que las impresoras 3D tomen un rol relevante a la hora de crear prótesis para animales que han sido víctimas de accidentes, maltratos o defectos de nacimiento.
ds