Todo parece indicar que en el caso de los actos de corrupción cometidos por la empresa española Obrascón Huarte Lian (OHL) México, en el que están implicados funcionarios del gobierno del Estado de México, a cargo de Eruviel Ávila, prevalecerá la impunidad, pues las conexiones llegan hasta la residencia oficial de Los Pinos.
Por el momento, la Secretaría de la Función Pública (SFP) inició las auditorías a los contratos que ha realizado la Secretaría de Comunicaciones y Transportes con OHL, que ascienden a 23 mil 684 millones de pesos, según lo informó el titular de la SFP, Virgilio Andrade.
Cabe destacar que el funcionario aclaró que el núcleo de las operaciones de OHL que han desatado los escándalos y propiciado el desplome en el costo de sus acciones, el Viaducto Bicentenario, contratado con el gobierno del Estado de México, no corresponden a la competencia de la SFE, sino a las autoridades del Ejecutivo mexiquense.
Virgilio Andrade dijo que se prevé la contratación de auditorías externas para investigar los contratos de la empresa OHL México con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT). Por ahora el castigo solo se está aplicando, en el caso de México, en las operaciones de la Bolsa Mexicana de Valores en donde las acciones de la constructora conocer de permanente derrumbe.