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“Presidente, le pediría que antes de evaluarme, me provea de un techo para proteger a mis alumnos de la lluvia”

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(10 de julio, 2015).- A raíz del bombardeo mediático para el desprestigio del gremio y sobre la base de lucha en contra de una evaluación tomada como el eslabón perdido que salvará la educación del país; maestras y maestros hacen una crítica visual a través de la página de Facebook denominada “Las escuelas jodidas de México”.

118 planteles de preescolar, primaria, secundaria y bachilleratos públicos son fotografiados por el magisterio que trabaja en ellos, todas las fotos muestran las malas condiciones de la infraestructura, así como el inmobiliario con el que tiene que trabajar.

La Secretaría de Educación Pública pagaría al Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi) 740 millones de pesos para realizar un censo con resultados similares a los de la página de Facebook.

Las escuelas exhibidas muestran techos de lámina a medio caer (de esos techos que se calientan con el sol cual sartenes en la estufa); baños en condiciones sanitarias deleznables; fosas sépticas donde lo último que se antoja es hacer del baño; mesas y bancas astilladas; fugas de agua; pisos de tierra; salones obscuros; ventanas de cartón, entre un largo etcétera más.

En contraste, este año el presupuesto de la SEP es de 330 mil millones de pesos y, de ellos, 14 mil millones son para los programas de infraestructura educativa.

Además, el País cuenta con un Instituto Nacional para la Infraestructura Física Educativa (INIFED), encargado desde el sexenio pasado de certificar y darle mantenimiento a las escuelas, el cual tiene un presupuesto anual de 188 millones de pesos y en él laboran 325 personas.

A pesar de ello, en la página que usan los maestros para exhibir sus salones de clase se muestran letreros donde se les pide a los padres de familia una cooperación voluntaria para arreglar una bomba del agua, o cooperar con tres tabiques y 300 pesos para completar la pared de un salón.

La profesora Mayté González, quien trabaja en el Municipio de San Pedro Garza García, Nuevo León, envió una fotografía y una carta dirigida a Enrique Peña Nieto.

“Estas son las condiciones en las que trabajamos muchos docentes a los que quiere evaluar”, dice en la misiva al tiempo que la imagen exhibe una escuela sin techo.

“Para terminar, señor Presidente, le pediría que antes de pensar en aplicarme una evaluación, tenga la bondad de proveerme de un techo para proteger a mis alumnos de la lluvia y el sol”, expresa.

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