Científicos del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva (Alemania) estudiaron el comportamiento de 15 chimpancés (Pan troglodytes) de la Reserva de Chimpancés de Sweetwaters (Kenia) durante cinco meses y descubrieron que estos animales son capaces de confiar más en aquellos miembros de su grupo a los que consideran amigos, al igual que hacen los humanos.
“Los estudios que se han realizado hasta el momento han demostrado que los chimpancés cooperan entre sí en multitud de contextos: comparten la comida, se acicalan mutuamente, cazan monos y vigilan su territorio”, explica a Sinc Jan Engelmann, del instituto alemán y uno de los autores principales del estudio publicado en Current Biology.
“Sin embargo, esos estudios no han investigado cuáles son los mecanismos que impulsan a los chimpancés a actuar así. Este es el primer trabajo que se centra en este aspecto”, añade el investigador.
Engelmann, junto a la científica Esther Herrmann, sometió a los chimpancés a una versión modificada del juego del ultimátum para demostrar que estos animales tienden a confiar más en sus amigos que en aquellos que no lo son. Durante el experimento se escogió a una pareja de chimpancés y se colocó en medio de ambos dos cajas con comida y una cuerda en el extremo: una de ellas era la de la confianza y la otra, la de no-confianza.
Cuando uno de los chimpancés elegía la caja de no-confianza se quedaba con la caja de comida –que no era especialmente atractiva para ellos– y el otro no recibía nada.
Por el contrario, si tiraba de la cuerda de confianza, cedía la otra caja a su compañero –con comida mucho más apetitosa– y este último tenía la opción de decidir si se quedaba con todo o cedía parte del contenido al otro chimpancé, con lo cual ambos podrían obtener un beneficio.
Una versión modificada del juego del ultimátum permitió a los investigadores descubrir que los chimpancés confían más en sus amigos que en otros compañeros que no lo son. / Engelmann & Herrmann
Cada chimpancé se expuso al experimento 12 veces con amigos y otras 12 veces con los que no eran sus amigos. Los resultados revelaron que la confianza jugaba un papel fundamental, ya que el que elegía prefería la segunda opción cuando su compañero era un amigo.
Según los investigadores, esto demuestra que los chimpancés están dispuestos a ceder los recursos a su compañero si tienen un vínculo estrecho, asumiendo el riesgo de no recibir nada después, pero con la posibilidad de obtener un premio mucho mayor.
No es solo cosa de humanos
“Estábamos interesados en estudiar a los chimpancés porque son nuestros parientes más cercanos junto con el bonobo (Pan paniscus), así que son unos candidatos ideales para manifestar comportamientos similares a los de los humanos, como la cooperación”, explica Engelmann.
Los investigadores afirman que la confianza que muestran los chimpancés con sus semejantes tiene factores en común con las relaciones interpersonales que establecen los seres humanos y que, desde luego, esta no es una característica exclusiva de nuestra especie.
Engelmann y Herrmann consideran que el estudio de las relaciones sociales en los primates, y concretamente en los chimpancés, puede resultar clave para explicar su comportamiento individual.
“Ahora queremos seguir estudiando las similitudes entre la forma de relacionarse que tienen estos animales y nuestra especie, y resolver cuestiones como: ¿tienden los chimpancés a compartir y ayudar más a sus amigos que a otros compañeros?”, concluye Engelmann.