El día de hoy la columna va a ser un poco diferente, pues les quiero platicar un tema más personal. El 2 de abril es el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, y resulta de suma importancia para mí, porque en mi familia hay una personita que tiene esta condición.
Hace 11 años nació mi primo Rafita, y cuando era un recién nacido, recuerdo que su mamá decía que era un niño muy bueno porque dormía mucho. Fueron pasando las semanas y los meses, Rafita a primera vista tenia un desarrollo mas lento de lo normal, sin que existiera preocupación alguna por ello; justamente a los 6 meses de vida la pediatra le hizo saber a mi tía que probablemente el bebé necesitaría estimulación, ya que su desarrollo no era “normal”.
A partir de ahí comenzó un largo proceso para entender la condición de mi primo y dentro de ese proceso surge el amigo Philips. Un día mi tía se percató que Rafita pasaba mucho tiempo viendo al techo y, a modo de “guasa”, le preguntaba que ¿si estaba viendo a su amigo Philips? -refieriéndose a la marca del foco- sin saber que ver objetos brillantes por un tiempo prolongado era un signo de la condición de su hijo.
El proceso para entender su trastorno fue difícil y complejo, mi tía junto con el apoyo de la familia tuvo que ir con varios especialistas para poder tener un diagnóstico certero sobre el padecimiento de Rafis como cariñosamente le decimos.
En México existen muchos niños y adultos que tienen autismo, por ello es importante visibilizar, atender y proteger a las personas con condición del espectro autista.
El 30 de marzo de 2015 se publicó la Ley General para la Atención y Protección a personas con la condición del Espectro Autista y un año después, el 21 de junio de 2016, se publicó su reglamento.
Contar con un marco normativo especializado, creado con el objeto de impulsar la plena integración e inclusión a la sociedad de las personas con la condición del espectro autista resulta imprescindible en el avance hacia la protección de sus derechos y necesidades fundamentales.
Si bien una Ley General, así como el reglamento que de ella emana, son de observancia obligatoria para todas las autoridades tanto a nivel federal, local y municipal, es necesario resaltar que hay entidades federativas, 21 para ser exacta, que tienen una legislación local al respecto del espectro autista. Sin embargo, 11 son los Estados aún que no cuentan con una ley local al respecto, entre los cuales se encuentra Yucatán, Querétaro, Puebla, Morelos, Estado de México, Hidalgo, Guerrero, Guanajuato, Campeche, Baja California Sur y Aguascalientes.
Por tanto me parece importante crear no solamente una concientización al respecto del tema del espectro autista, sino que también es necesario que las autoridades fijemos nuestros esfuerzos en la atención y protección de las personas que tienen esta condición pues solo así podremos tener una sociedad verdaderamente incluyente.
– Andrea Tovar Saavedra –