La consultora Michela Guarente responde apreguntas de los usuarios de Hablemos de Sexo y Amor de forma personalizada.
PREGUNTA:
He intentado tener relaciones. Un ex novio que tuve logró penetrarme parcialmente pero entonces no seguimos, por el miedo me generaba dolor. Mis preguntas son: ¿Aún soy virgen? ¿debo ir al ginecólogo? Le tengo pánico a estos especialistas porque cuando no había tenido contactos o intentos de relación sexual, uno me introdujo su dedo y me sentí ultrajada además de que también presenté dolor. Espero ansiosa las respuestas.
RESPUESTA:
La virginidad, teóricamente, implica no haber mantenido relaciones sexuales con penetración, conservando la integridad del himen, que es una estructura que en muchos casos pueden ser flexible y puede desgarrarse por actividades diferentes a las relaciones sexuales. Sin embargo, esto es relativo porque no en todas las relaciones sexuales hay penetración completa (como en tu caso) y además la virginidad, también tiene una valoración emocional, de experiencia, es decir, ¿cómo te sientes frente a la actividad erótica que has tenido?
NOS CUENTAS QUE HUBO PENETRACIÓN PARCIAL Y DESCONOCEMOS SI SE ROMPIÓ EL HIMEN. ESO SOLO PODRÍA APRECIARLO UN/A MÉDICO/A EN UNA CONSULTA GINECOLÓGICA.
¿CÓMO ES UNA CONSULTA GINECOLÓGICA?
En principio, se conocerán y luego el o la especialista tomará tus datos y te hará una serie de preguntas, donde explorará tus antecedentes personales y familiares (esto también ayudará en la orientación del método anticonceptivo). Te preguntará también (entre otras muchas cosas), si has tenido relaciones sexuales y allí, procedes a explicar tu experiencia. Sabemos que puede ser estresante e incómodo, pero ten la confianza que toda la información es confidencial y que ningún médico puede juzgarte.
Luego del interrogatorio, pasan al examen físico, donde estarás cubierta con una bata especial para este tipo de exámenes y luego, reposarás en una camilla ginecológica. El o la especialista te realizará exploración del tórax, mamas, de abdomen (y con él, el tacto vaginal) y mirará genitales internos y externos. Esta parte del examen no debe ser dolorosa, pero si una está ansiosa o nerviosa, involuntariamente se pueden contraer los músculos de la vagina, dificultando la exploración y generando malestar. Es importante comunicar esta ansiedad a tu doctor o doctora para que pueda crear un clima de calma. Si te ayuda a estar más tranquila, puedes solicitar que una enfermera se quede contigo durante el examen físico.
La visita puede complementarse con otros exámenes como la citología o ecografías.
Entendemos que ésta consulta genera ansiedad, pero evita postergarla porque es importante el control de tu salud sexual y además porque si en el futuro va sa tener relaciones sexuales, es ideal tener protección contra embarazos e infecciones.
CUANDO EL MOTIVO DE CONSULTA ES SOLO LA DECISIÓN DEL MÉTODO ANTICONCEPTIVO, NO ES NECESARIA LA EXPLORACIÓN FÍSICA.
Cuentas que en tu visita anterior al ginecólogo tuviste una experiencia dolorosa. Lamentamos tu incomodidad y queremos que estés informada para que puedas exigir tus derechos en la consulta médica. Si sientes que te hace daño, ¡coméntalo!. Exige que se detenga para atenuar la molestia. El/la especialista debe encargarse que esto no pase y si alguno/a tuviese alguna conducta inapropiada puedes reclamar y pasar incluso a la denuncia.
Es importante que acudas por lo menos una vez al año a este/a especialista, pues permite cuidar tu salud sexual y ejercer el derecho de elegir un método anticonceptivo. Así estarás preparada en tus próximas relaciones sexuales, con método y con información.