(10 de noviembre, 2014).- La noche del 8 de noviembre, después de arribar la marcha a la plancha del Zócalo, la cual procedía de la Procuraduría General de la República, se registraron altercados entre supuestos manifestantes que derivaron en un incendio en las puertas de Palacio Nacional, del que anteriormente se habían derribado las vallas de protección metálicas que lo rodeaban; y las posteriores detenciones de varias personas en los alrededores del Centro Histórico.
Lo que muchos asistentes a la movilización consideraron una anomalía, fue la falta de seguridad que custodiaba de la sede del poder Ejecutivo del país, puesto que siempre se encuentra rodeada de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y miembros del Estado Mayor Presidencial.
Otra acontecimiento que resaltó por lo ‘extraño’ que se fue que los supuestos ‘encapuchados’ que fueron los incitadores de la quema de la puertas de Palacio Nacional, quienes testigos aseguran, se encontraban ‘esperando’ a que llegara el resto del contingente para levar a cabo la acción directa contra el Palacio de Gobierno.
Uno de los incitadores, portador de una máscara de Guy Fawkes ‘Anonymous’, fue identificado debido a unas fotografías que circulan en las redes sociales, como el subteniente Lennin Moreno Rosales, quien portaba una credencial que lo acreditaba como miembro de la Sedena, en el bloqueo de la coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación el año pasado en la ciudad de México.
En el video mostrado por Revolución TresPuntoCero, se puede observar al supuesto subteniente Moreno Rosales, como incita a los demás manifestantes a que expresen su ira a través de pintas, arrojar piedras e incluso entrar en discusiones verbales contra las personas que no están de acuerdo con que tomen ese tipo de acciones.
Además, tuiteros han presentado fotografías que muestran a otro de los supuestos incitadores encapuchados de las vejaciones a Palacio Nacional en el momento en el que se esconde tras elementos del Estado Mayor Presidencial, armados con toletes y escudos mientras resguardan la puerta de la sede.
Lo que abre el cuestionamiento si en realidad los hechos acontecidos el sábado fueron obra de manifestantes indignados o una provocación por parte del Estado, enviando a uno de sus aparatos para disolver el movimiento social.
Mientras, los detenidos en las calles aledañas a la Plancha del Zócalo se encuentran en las instalaciones de la SEIDO, acusados de delincuencia organizada y denuncian arbitrariedad al momento de la aprehensión, puesto que fueron detenidos al momento de grabar o tomar fotografías o solamente eran asistentes a la marcha que se manifestaban de forma pacífica.
Fotos: Gerardo Vieyra / @gevieyra