(06 de diciembre, 2015. Revolución TRESPUNTOCERO).- Hace unos días, la compañía multinacional Coca-Cola levantó innumerables críticas por un video publicitario que muestra a un grupo de jóvenes de tez blanca y pertenecientes, aparentemente, a una clase alta arribando a Totontepec, un poblado mixe en Oaxaca. Los muchachos llegan en un auto derramando jovialidad y entusiasmo mientras que los pobladores, curiosos y un poco desanimados, los ven pasar.
Entre palmaditas, miradas y abrazos paternalistas, los jóvenes iluminan, junto con la comunidad, un mensaje colocado en un árbol construido con maderas y taparroscas de Coca-cola: “Permanezcamos Unidos”, se lee en lengua mixe.
El video que concluye con un “tú también rompe el prejuicio” ha provocado una profunda indignación por ser, justamente, un anuncio lleno de equivocados estereotipos raciales y culturales.
Entre los que alzaron la voz, está el Poder del Consumidor, quien emitió un comunicado donde se lee: “Organizaciones sociales y miembros del pueblo mixe solicitamos al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) proceder contra la empresa Coca-Cola por la publicidad realizada en la comunidad mixe de Totontepec, Oaxaca, por discriminatoria y atentar contra la dignidad, cultura y salud de los pueblos indígenas”.
Por su parte Elvira Constantina Pablo Antonio,indígena mixe y miembro de la ONG Asesoría Integral y Litigios Estratégicos a Pueblos Originarios acusó que este comercial “fomenta un acto de discriminación y racismo y además fomenta la ruptura del tejido social pretendiendo imponer una cultura de consumo y ajena a las comunidades.”
Además, señaló que esta publicidad da una idea completamente alejada a la realidad de las tradiciones propias de los pueblos en épocas decembrinas: “en esta época, la navidad tiene un sentido comunitario y de fortalecimiento de lazos entre todas las personas que somos parte de la comunidad.”
Y es que más allá de ser un mensaje de “unión”, este spot sitúa las poblaciones indígenas como subordinadas y se impone un modelo de cultura de consumo que no existe en ellas.
El asunto no para ahí. Pocas empresas han hecho tanto daño a comunidades indígenas (y a la población en general) como la refresquera. No sólo por el agua que contaminan y de la que privan a poblaciones enteras, sus productos afectan profunda y extensivamente a la población que las consume.
La Alianza por la Salud, en voz de uno de sus miembros, el doctor Abelardo Ávila recalcó: “es indignante que se utilice a la comunidad indígena y se ponga en lengua mixe la frase ‘permanezcamos unidos’, cuando estas bebidas se han convertido en una amenaza y un daño catastrófico a la salud de la población indígena del país. La vulnerabilidad de estas comunidades en términos de salud es extrema, se trata de poblaciones viviendo en alto y muy alto grado de marginación”.
Ante esto, Coca-Cola emitió un comunicado donde pidió disculpas por el anuncio pero argumentó que “lo malinterpretaron.” En entrevista radiofónica, Diego Bracamontes , director de publicidad de la refresquera, dijo “nunca se buscó el tema de ofender o subestimar a nadie con este video, por lo cual no volveremos a hacer público el video” y hace unos días lo retiraron de You Tube.
Por su parte, las organizaciones ya mencionadas, elaboraron una respuesta directa y clara ante este spot. En un “anticomercial” mencionan que en 2012, 2.8 millones de indígenas no contaban con acceso a los servicios de salud y que cerca de un tercio de la población oaxaqueña no cuenta con acceso a agua entubada. Señalan que la diabetes hace unos años era escasa y con el consumo de refrescos ha aumentado alarmantemente.
Es obligación del Estado “garantizar, prevenir, proteger y respetar los derechos humanos contenidos en la Constitución, pero también en todo tratado internacional del que México es parte, como el Convenio 169 de OIT y la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas”, puntualizan las organizaciones.
