“Si no se avanza en el combate a la corrupción, el nuevo gobierno va a tener que enfrentar un costo muy alto porque este problema es el obstáculo más grande para el desarrollo del país y de las empresas”, dijo Fernando Sentíes, presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales de Ética y Cumplimiento (AMPEC).
Además, se informó que las cifras del costo económico de la corrupción en México van de 2% a 9% del PIB, pero esta gran diferencia se debe a que las estimaciones más conservadoras se limitan a determinar el costo basado únicamente en los pagos facilitadores para agilizar trámites o sobornos para evitar multas y cosas que son relativamente fácil de medir, de acuerdo con El Universal.
Sin embargo, “algunos otros estudios consideran aspectos que van más allá de lo que se paga, como el costo de oportunidad, es decir, cuánto se deja de invertir en el país porque hay corrupción, por lo que el valor ampliado de ese problema, no sólo por el costo del hecho en sí mismo, sino por sus consecuencias puede ir de 5% a 9% del PIB”, señaló el especialista.
Con respecto al tema de la deshonestidad “se ha convertido en una bandera clave de la contienda política por la presidencia, por lo que la postura de los principales candidatos es clave para saber lo que puede suceder en el futuro, en particular por lo que se refiere al Sistema Nacional Anticorrupción”.