La mañana de este viernes, el presidente Andrés Manuel López Obrador, ofreció, una vez más, un informe sobre el acuerdo de agua entre México y Estados Unidos que obliga a nuestro país cumplir con la entrega de un porcentaje del agua que se recibe por el Río Bravo.
El gobierno federal aseguró que no es movimiento espontáneo porque no ha habido falta de agua, sino que detrás hay intereses políticos y económicos.
El director general para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Roberto Velasco Álvarez, y la directora de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Blanca Jiménez, explicaron diversos puntos sobre el asunto.
En tanto, el subsecretario de Seguridad Pública, Ricardo Mejía, explicó que en el conflicto también está involucrada la familia Urionabarrenechea, así como a políticos y delincuentes en el acaparamiento de agua en Chihuahua.
“Aquí hay una familia Urionabarrenechea que está ligada al gobernador César Duarte, el suegro de uno de ellos fue el presidente de la Junta de Aguas y Saneamiento de aguas de Chihuahua. “Este grupo es importante porque estuvo detrás del financiamiento de la movilización y están ligados a César Duarte, por eso advertimos que el supuesto pleito entre Duarte y Corral es testimonial. Esta familia acapara el agua, tiene casi 9 millones de metros cúbicos del agua”, explicó mediante diapositivas.
Además, aseguraron que el gobernador Javier Corral siempre estuvo enterado del tratado de aguas con Estados Unidos y que sabe que debe ser el gobierno federal quien asuma este compromiso.
