En la conferencia del Pueblo de este martes 30 de septiembre, la presidenta Claudia Sheinbaum fue clara:
“Las deudas no se politizan, se pagan”.
Con esa frase, la mandataria respondió al empresario Ricardo Salinas Pliego, quien desde Estados Unidos —en una entrevista con Fox News— acusó de inseguridad, corrupción y supuestos nexos criminales en México.
Pero la presidenta no dejó espacio a dudas:
“Él quiere jugar el papel de víctima, cuando no tiene nada que ver con eso. ¿Cómo ir a Estados Unidos, si aquí tiene una televisora en la que habla todos los días en contra del gobierno? Y todavía ir a decir mentiras allá […] Las deudas no se politizan, se pagan”.
La cuenta pendiente: 48 mil millones
El caso no es menor. Según explicó Sheinbaum, los litigios fiscales de Salinas Pliego ya ascienden a 48 mil millones de pesos. La Procuradora Fiscal, Grisel Galeano, detalló días atrás que esos asuntos están en la Suprema Corte de Justicia.
La presidenta fue tajante: si el empresario decidiera pagar, podría acceder a los beneficios que otorga el Código Fiscal, como descuentos en multas. “Pero tiene que decidir pagar”, recalcó.
Abusos del amparo y justicia lenta
La discusión abrió paso a otro tema: la reforma a la Ley de Amparo.
“¿Quiénes han abusado de la Ley de Amparo? Los que más recursos tienen. Se trata de que la justicia sea rápida, que no tarde 15, 20 o 30 años en resolverse un caso. Eso es lo que se busca con la reforma al Poder Judicial y la nueva Corte”, explicó la mandataria.
De acuerdo con Sheinbaum, la iniciativa busca frenar suspensiones que alargan juicios fiscales, como ocurre en el caso de los grandes deudores.
Reunión en puerta
Entre las revelaciones más explosivas, Sheinbaum confirmó que recibió una carta de quienes reclaman pagos a Salinas Pliego:
“Me solicitan una reunión en Estados Unidos. Sí, nos vamos a reunir. Seguramente la próxima semana”, afirmó.
Así, el tema deja de ser un asunto de declaraciones cruzadas para trasladarse a la mesa de negociación con los acreedores.
De la televisión a Fox News
La presidenta también cuestionó la estrategia mediática del empresario:
“Él quiere jugar el papel de la víctima, cuando no tiene nada que ver con eso […] Debe aquí, allá y acuyá. Y entonces quiere politizar este asunto. ¿Cómo? El que no esté de acuerdo con nosotros es su derecho. Tiene que cumplir con las normas, con la ley. Eso es todo lo que decimos”
En sus palabras, la deuda no es un asunto político ni mediático, sino de ley.