Con 70 años de edad, Sarkozy se convirtió en el primer ex jefe de Estado de Francia –desde el fin de la Segunda Guerra Mundial– en ingresar a prisión desde la Segunda Guerra Mundial. La decisión judicial ordenó su reclusión inmediata pese a que su defensa interpuso un recurso de apelación que aún está pendiente de resolución.
Previo a su ingreso al centro penitenciario, el ex presidente publicó en la red social X un mensaje en el que aseguró ser víctima de un “escándalo judicial” y reiteró su inocencia.
— Nicolas Sarkozy (@NicolasSarkozy) October 21, 2025
Durante su gestión entre 2007 y 2012, Sarkozy habría permitido que allegados suyos recurrieran a fondos provenientes del régimen libio de Muamar Kadafi para financiar parte de su campaña. Aunque el tribunal no acreditó que el dinero se utilizara directamente en los gastos electorales, consideró probada la salida de recursos desde Libia, lo que fundamentó la condena por asociación ilícita.
El ex mandatario permanece en una celda de nueve metros cuadrados dentro del área de aislamiento, donde cumplirá su pena bajo estrictas medidas de seguridad. Según sus abogados, podría obtener libertad condicional en las próximas semanas, mientras la justicia francesa resuelve su apelación.
Con este caso, Sarkozy suma tres condenas judiciales, entre ellas por corrupción y tráfico de influencias, aunque mantiene abiertas otras investigaciones. La sentencia ha generado una amplia discusión pública sobre la independencia del poder judicial y la relación entre la clase política y la justicia en Francia.
