Los telescopios espaciales de rayos XMM Newton y XRISM han detectado una explosión nunca antes vista.
Que provenía de un agujero negro supermasivo según reveló la Agencia Europea (ESA).
En cuestión de horas provocó poderosos vientos, expulsando material al espacio a velocidades vertiginosas de 60 mil kilómetros por segundo.
Los astrónomos detectaron una brillante llamarada de rayos X.
Misma que surgió del agujero negro antes de desvanecerse rápidamente.
Cuando desapareció surgieron vientos rápidos.
“Cómo una rápida ráfaga de rayos X procedente de un agujero negro desencadena inmediatamente vientos ultrarrápidos, que se forman en un solo día”, describieron.
Pues el agujero tiene na masa equivalente a 30 millones de soles.
Al alimentarse del material cercano nutre dicha región extremadamente brillante y de está forma activa en el corazón de la galaxia espiral.
“Parecen haberse creado cuando el enredado campo magnético del AGN se ‘desenroscó’ repentinamente, de forma similar a las erupciones que surgen del Sol, pero en una escala casi demasiado grande para imaginarla”, explicaron.


