Como parte de los trabajos implementados en el marco de la Operación Frontera, autoridades federales ubicaron y deshabilitaron estos puntos de producción en distintos municipios de Sinaloa, donde se concentraba equipo y componentes vinculados a la manufactura de sustancias ilícitas. El operativo permitió retirar del circuito criminal una cantidad significativa de insumos y maquinaria especializada empleada para acelerar los procesos de síntesis.
En Baja California, los despliegues se enfocaron en la ciudad de Tijuana, donde fueron detenidas dos personas y se aseguraron dos armas cortas, tres cargadores, 11 cartuchos y un inmueble. La intervención formó parte de las tareas de vigilancia orientadas a disminuir actividades relacionadas con grupos delictivos que operan en la zona fronteriza.
En el mismo operativo, se realizaron acciones adicionales en Culiacán, Sinaloa, donde se incautaron tres armas largas, seis cargadores, 140 cartuchos, un vehículo con reporte de robo, una motocicleta y un inmueble, como parte del seguimiento a actividades armadas detectadas en ese municipio.
En Sonora, los patrullajes en Hermosillo derivaron en dos aseguramientos distintos. En el primero se detuvo a tres personas y se confiscó un total de 51 dosis de metanfetamina, 158 de marihuana y dinero en efectivo. En un segundo punto del mismo municipio, otra persona fue arrestada tras localizarse 57 dosis de marihuana y 20 de metanfetamina. Estas intervenciones se realizaron con el propósito de frenar la distribución local de sustancias ilícitas.
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