Morena ha acusado al Gobierno de la Ciudad de México de busca la compra de votos a través de monederos electrónicos Broxel, que entregó en diciembre a 100 mil trabajadores.
Señaló que, “cada uno recibió el plástico, que sirve como prepago en el Metro, con 280 pesos, remanente de los vales de despensa de fin de año”.
César Cravioto, vocero de la candidata Claudia Sheinbaum, indicó que “a los trabajadores registrados para la entrega de tarjetas, miembros del Sindicato, solicitan 10 votos a cada beneficiario en favor de Por la CDMX al Frente, según testimonios de los propios servidores públicos”, de acuerdo con Reforma.
Los votos se deben registrar con fotografías, para enviarlos a su vez en códigos QR, para después recibir beneficios como pagos en la tarjeta, cuya cantidad no especificaron. “Están tirándole entre 300 mil y 500 mil votos, a partir de esta operación”, estimó Cravioto.
El legislador comparó este esquema con el de Monex en 2012 para la campaña de Enrique Peña Nieto a la Presidencia y dijo que realizarán las denuncias correspondientes.
A su vez, el diputado Alfonso Suárez del Real dijo que “la operación se trata de un convenio entre la Secretaría de Desarrollo Económico local, Master Card y Broxel, donde una empresa proporciona los recursos y otra el plástico”.
La empresa Broxel negó en un comunicado que participe en alguna campaña política ni un uso ilegal de sus plásticos.
