(03 de junio, 2014).- Tras haber visto la luz mediante una lectura dramatizada en la Muestra de la Joven Dramaturgia de Querétaro en 2012, y posteriormente en el Ciclo de Letras Emergentes de la Escuela Mexicana de Escritores CENART 2014; ahora, la obra Aperturas de Nora Coss ha llegado al Teatro La Capilla, producida por la compañía Teatro de Sal en conjunto con Un Colectivo de Duendes A.C., bajo la dirección de Rodrigo Rangel y con música original de Soni Sonora.
Aperturas, que toma su nombre de la fase inicial del ajedrez, también está programada para leerse en la próxima Semana de la Dramaturgia Contemporánea de Nuevo León 2014, estado de donde es originaria la autora.
Un escritorio rodeado por montañas de cajas y archivos de oficina, con una cafetera en el rincón, es el espacio de juego para dos personajes –interpretados por Alberto Cerz y Fabián Varona–, quienes deben chocar todo el tiempo con el otro, a causa de su inmersión en un mundo laboral que conforme avanza la obra se vuelve más abstracto, al adentrarse en la hostilidad y el cíclico casi absurdista de las condiciones de trabajo provistas por el neoliberalismo.
La puesta en escena juega con un tono que combina actuaciones cotidianas y naturales, contrastadas con momentos oníricos, los cuales funcionan para detonar la progresión dramática, sobre todo evitando que la obra pierda ritmo, ya que utiliza como recurso consciente la reiteración.
De esta manera, consigue producir en el espectador una sensación de rutina –característica del ambiente oficinista–, pero al mismo tiempo vertiginosa y en ocasiones violenta, con lo que se redondea y potencia el discurso establecido desde el texto dramático: la monotonía y decadencia humanitaria que puede terminar absorbiendo a los que peyorativamente se les ha estigmatizado como “Godínez”, a razón de una manipulación constante por parte de las figuras de poder y la jerarquización de las estructuras laborales en el país.
Los personajes, privados de identidad, se nombran entre sí únicamente por su profesión –Contador y Arquitecto, respectivamente– y mantienen una tensión dramática de “estira y afloja” de autoridad, intrigas y humillación, que va llevando al público entre la risa, la sorpresa y algunos amargos sabores de boca, producto de un reflejo social con el que resulta difícil no empatizar.
A propósito de lo anterior, “¿Cafecito?”, es la pregunta que sirve de pretexto para empezar las discusiones de los personajes, y por lo tanto el elemento simbólico siempre presente en el montaje; tanto apoyando la convención del espacio-oficina y su atmósfera, como solucionando las tareas escénicas de los actores, ya que el manejo de las tasas siempre devela lo que está debajo de las palabras, muchas veces disfrazado de lenguaje laboral y supuesto respeto entre los personajes.
La cita para echarse este “cafecito” teatral que propone un diálogo directo con la realidad actual es hoy 3 de junio y el próximo martes 10 a las 20:00 horas en el Teatro La Capilla (Madrid No. 13, Colonia del Carmen Coyoacán). Los costos de los boletos son de 150 pesos, y 100 para estudiantes, maestros y/o beneficiarios del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam) con credencial.
