La jefa de Gobierno, Clara Brugada, encabezó la inauguración del Centro de Atención Integral de Búsqueda de Personas (CAIBP) de la Ciudad de México, para cuya rehabilitación se destinó una inversión de 43 millones de pesos. El nuevo espacio busca concentrar en un solo punto a todas las instituciones encargadas de atender y coordinar la búsqueda de personas desaparecidas, con un enfoque humano y de respuesta inmediata.

Durante el acto de apertura, Brugada Molina destacó que este centro representa el cumplimiento de un compromiso asumido por su administración en abril pasado, orientado a terminar con el “peregrinar” de las familias que durante años han tenido que acudir a múltiples dependencias para obtener información sobre sus seres queridos.

El inmueble, que anteriormente albergó las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo), fue sometido a un reforzamiento estructural y rehabilitación integral desde la planta baja hasta el segundo nivel, además de la adecuación del sótano, donde se encuentran ahora los equipos especializados para la búsqueda e identificación de personas.

En el CAIBP colaboran diversas instancias, entre ellas la Comisión de Búsqueda de Personas de la Ciudad de México, el Grupo Especializado de Apoyo a la Búsqueda Inmediata de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, la Dirección Biopsicosocial para la Atención Pericial a Víctimas, así como la Fiscalía Especializada en Desaparición de Personas y la Fiscalía de Desaparición Cometida por Particulares.
Durante su intervención, la fiscal capitalina, Bertha Alcalde Luján, subrayó que el propósito central del nuevo centro es ofrecer una respuesta institucional unificada, mejorar la coordinación interinstitucional y garantizar atención inmediata a las familias que denuncian la no localización de una persona.

Asimismo, recordó que, con la creación de la Unidad de Identificación Humana y Búsqueda de Familias de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX), se ha logrado localizar a más de 300 familias y entregar de manera digna los restos de 196 personas fallecidas, fortaleciendo así los mecanismos de verdad y justicia para las víctimas y sus allegados.


