Dr. Carlos Oaxaca Escobar / droaxaca@prodigy.net.mx
(04 de julio, 2014).- Es una malformación congénita que puede ser consecuencia de una infección sufrida por la madre durante los primeros tres meses de embarazo.
Nacer con labio y paladar hendido es producto de una malformación congénita, cuya causa es multifactorial, es decir, si la madre padeció infecciones en el primer trimestre del embarazo, de las que se denominan subclínicas (porque las manifestaciones no son tan visibles), pudiera ser una razón. El uso de medicamentos no prescritos en este importante “primer trimestre del embarazo” que es cuando se lleva a cabo la formación de órganos también es una de las causas.
Lo primero que deben hacer los padres, es acudir con un cirujano plástico que tenga experiencia en el manejo de estos pacientes, ya que se requiere de un equipo con amplia experiencia, como por ejemplo el ortodoncista. A la semana de vida se inicia con una placa palatina y un aditamento que, además de ayudarle a deglutir su leche, reorientará los segmentos de paladar hendido y ayudará a que la nariz se vaya remodelando en los primeros tres meses.
Entre el tercer y sexto mes, el bebé estará preparado para someterse a su primer cirugía de labio y nariz, en la cual estará presente el anestesiólogo pediatra para reducir riesgos y complicaciones.
La cirugía dura dos horas aproximadamente y generalmente el bebé puede ser dado de alta el mismo día. La recuperación completa toma entre tres y seis meses.
Después habrá que pensar en operar el paladar, esta cirugía también tiene una duración de dos horas se requiere que el bebé permanezca en el hospital hasta el día siguiente y se deja dieta licuada por 3 semanas. Se efectúa entre los 12 y los 18 meses de edad, ya que para esta etapa la cara del bebé ha crecido lo suficiente y la operación debe realizarse antes de que inicie a hablar (etapa de fonación). Si se opera en esta etapa, la fonación será normal; cuando son operados en edades mayores, los niños empiezan con vicios para hablar, lo cual es muy difícil de quitar.
El cambio que se logra es tan impresionante donde todos debemos quedar ampliamente satisfechos.