Guanajuato/Zona Franca. La presunta violación de una estudiante de secundaria por su maestro de educación física en la capital del estado, trató de ocultarse por directivos de la institución, convenciendo a la victima de que no realizara denuncia alguna.
La estudiante rechazó peticiones e intimidaciones y acudió con sus padres al Ministerio Público, donde ya se ha abierto una carpeta de investigación sobre el caso.
Los hechos ocurrieron en el Centro Educacional Piloto, una escuela pública de la ciudad de Guanajuato, que está ubicado en Carretera. Gto-Marfil Km. 2. 5
De acuerdo con la información de Verónica Espinoza, publicada en la revista Proceso, las autoridades de la institución educativa, en vez de apoyarla, la tacharon de mentirosa. Incluso, la situación fue más allá, pues la hostigaron delante de sus padres.
El progenitor de la joven abrió un expediente ante el Ministerio Público el 28 de abril, con el registro 1203/2014, iniciada por la agente Laura Esthela Acevedo Durán, de la Agencia Especializada en Delitos Sexuales y Violencia Intrafamiliar.
Además fue a la Procuraduría Estatal de los Derechos Humanos para quejarse del personal de la escuela, quienes ejercieron coerción para que la chica no denunciara. Los denunciados fueron Néstor Antonio Saucedo Valtierra; el subdirector Sergio Rosas Malacara y la asesora educativa, Emma Gómez Lagos.
El profesor de educación física, que responde al nombre de Víctor Manuel Anguiano Hernández, ordenó a la niña ir por una escoba y se encerró en el cuarto donde se guarda el equipo deportivo para la clase. Allí, abusó de ella al tocar sus partes íntimas. La niña corrió a su salón y escribió su experiencia en su cuaderno, para posteriormente enseñarselo a Emma, la asesora educativa. La mujer llevo a la alumna con el director, donde le preguntaron si acaso sabía lo que era una violación.
Posteriormente llamó a su padre, a quien le dijeron que el profesor de educación física sí le había pedido que fuera por la escoba, pero jamás la violó. El profesor argumentó que la niña le pidió cariño.
El personal de la escuela, delante del padre, siguió insistiendo que la niña estaba mintiendo.
“Espero que el maestro sea suspendido y que las autoridades de la Secretaría de Educación (SEG) hagan algo con los directivos de la secundaria, por la forma en que trataron a mi hija, no le creyeron ni la protegieron y en cambio se taparon entre todos y al maestro”, declaró el padre a la revista Proceso.
La alumna denunció al profesor ante los directivos de la institución, quienes trataron de convencerla para que no llevara el asnto más lejos.
La profesora Emma Gómez Lagos, junto con los directivos de la institución ejercieron presión en la niña, para que no dijera nada. Pero desistió y le contó a sus padres la noticia, con el fin de denunciar.
La situación provocó la indignación de los padres de la joven, quienes respaldaron su decisión de presentar una querella judicial.
El relato de los hechos fue respaldado con declaraciones de los padres de familia y otras alumnas, compañeras de la víctima, lo que obra en autos de la Carpeta de investigación, y ya ha sido consignado en medios de comunicación de la capital del estado.
Las autoridades comprobaron que la niña presenta daños tanto físicos como psicológicos.
Una escuela que no favorece a la mujer
La situación actual de la menor, cuestiona seriamente la situación de la mujer en Guanajuato.
El pasado 29 de abril, Lorena Cruz Sánchez, Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), destacó la labor que el estado ha realizado para atender los casos de violencia contra la mujer cuando visitó Guanajuato.
Lo anterior, se dio a raíz de las observaciones que realizó en torno al caso de Lucero Salcedo, cuando mandó recomendaciones al Gobernador para profundizar en el caso desde octubre del año pasado.
