La disputa por el acceso a la vivienda en la Ciudad de México volvió a encenderse. El grupo parlamentario del PAN en el Congreso capitalino anunció la presentación de un amparo contra el Bando Uno, la medida impulsada por la jefa de Gobierno, Clara Brugada, para regular rentas y contener la gentrificación en alcaldías donde los precios se han disparado en los últimos años.
En conferencia de prensa, la dirigencia panista afirmó que el decreto invade facultades de las alcaldías, particularmente las gobernadas por la oposición: Benito Juárez, Cuauhtémoc y Miguel Hidalgo, zonas donde el incremento de las rentas ha provocado expulsión de familias enteras.
“El gobierno no tiene derecho de meterse con tu departamento, tu patrimonio familiar ni con el precio al que decides rentarlo. Esa visión intervencionista y comunista es inaceptable”, aseguró el vicecoordinador panista Diego Garrido.
La presidenta del PAN en la ciudad, Luisa Gutiérrez Ureña, calificó el bando de “doloso” y lanzó:
“Le vamos a corregir la plana”.
El recurso legal
El amparo, promovido por el diputado Ricardo Rubio, se fundamenta en nueve conceptos de violación constitucional, entre ellos invasión de competencias y vulneración a la autonomía de las alcaldías. El legislador incluso invitó a la ciudadanía a sumarse antes del 27 de agosto:
“El amparo se pone a disposición de cualquier persona que desee presentarlo para defender la legalidad frente a este abuso de poder”, dijo.
La contradicción
Sin embargo, la estrategia legal del blanquiazul se da en un contexto en el que su propio partido ha sido señalado en escándalos de corrupción ligados al llamado Cártel Inmobiliario, un entramado que durante años permitió irregularidades en la construcción y permisos en la alcaldía Benito Juárez, hoy epicentro de la gentrificación capitalina.
Paradójicamente, es justamente esta demarcación la que concentra los mayores aumentos de renta y desplazamiento de vecinos, fenómeno que el Bando Uno busca mitigar.
Lo que busca el Bando Uno
La medida anunciada por Brugada el pasado 16 de julio plantea lineamientos para promover una Ciudad Habitable y Asequible, con Identidad y Arraigo Local. Entre los ejes está la regulación de precios de renta bajo criterios de justicia y accesibilidad, así como la obligación de garantizar vivienda digna en un entorno con servicios, escuelas, hospitales y espacios públicos.
En palabras del PAN, se trata de “ocurrencias”. Para el Gobierno de la Ciudad, se trata de enfrentar una realidad: el encarecimiento desmedido de la vivienda que expulsa a miles de familias de sus barrios.
El debate que viene
Mientras la oposición exige “planeación seria a 20 años” y acusa improvisación, el gobierno capitalino sostiene que el Bando Uno es el primer paso de una política integral contra la gentrificación, fenómeno global que ya golpea fuerte a la capital.
El choque entre el discurso panista y el nuevo bando apenas comienza. Pero la discusión no solo se juega en tribunales: también se libra en las calles, en los contratos de renta y en los hogares de millones de capitalinos.