En Acambay, Estado de México, comunidad identificada por el robo de combustible, el Presidente Andrés Manuel López Obrador fue recibido con una gran ovación durante su visita en la que hizo un llamado a los pobladores a dejar esa práctica y tomar de enseñanza lo ocurrido en Hidalgo.
“Fueron induciendo a muchos a que hicieran lo mismo y como el pueblo se abandonó y hay mucha pobreza y necesidad, y no tiene opciones o alternativas, pues se fue creando esta práctica del huachicol de tener una toma clandestina y sacar la gasolina y de esa manera obtener ingresos”, expuso.
López Obrador pidió frenar el huachicol en el municipio y le preguntó a los asistentes si contaba con ellos.
“¿Vamos para adelante? ¿Se acaba el huachicol? Que levanten la mano los que van a ayudar para convencer, persuadir de que no debe haber robo de combustible, levanten la mano”, insistió, a lo que la población respondió levantando la mano en muestra de apoyo.
López Obrador argumentó que decidió comenzar el plan de apoyo a 91 municipios involucrados en el robo de combustibles porque es de las comunidades donde más sustracción ilegal se registra del ducto Tula-Toluca.
De esta forma, recalcó que antes los ciudadanos no tenían apoyos y no tenían otro camino, pero ahora prometió habrá ayuda económica para ganarse la vida de otra forma.
“Quienes hasta ahora lo llevaron a cabo es por necesidad, porque creo que Acambay es un pueblo honesto”, sostuvo.
En este contexto, el político tabasqueño entregó las primeras tarjetas a adultos mayores, menores discapacitados y estudiantes.
CCCA.
