La caravana migrante autodenominada Éxodo de la justicia llegó la tarde de este miércoles a Pijijiapan, Chiapas, a una semana de su salida de la frontera con Guatemala.
En ocho días de caminata, el grupo ha recorrido apenas unos 150 kilómetros por la autopista México 200, un tramo que en automóvil llevaría sólo dos horas.
De los 370 integrantes censados que conformaban la caravana migrante, el día de hoy corporaciones de emergencia de Tonalá revelaron que únicamente son 189 las personas que caminan rumbo a la cabecera municipal, a quienes auxilian para que se mantengan en el carril derecho de la carretera costera sin ningún percance.
Algunos han accedido a la atención del Instituto Nacional de Migración y se supo que 9 extranjeros recibieron el permiso dentro del municipio de Mapastepec. Por otra parte, muchos de los faltantes se han quedado varados en los municipios costeros y otros han avanzado por su cuenta en los tramos que pudieron tomar transporte público federal.
Según información de La Jornada, la mayoría no confía en las autoridades y asegura que seguirán su travesía a pie en busca de llegar a la Ciudad de México, donde quieren encontrar empleo y continuar con sus trámites de regularización.
En la frontera sur, han asistido a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados durante meses, les han negado el asilo o no les dan respuesta. Sobre sus intenciones, una mujer cubana de la tercera declaró al mismo medio:
“Vamos buscando trabajo, estabilidad, una vida honesta, una vida que podamos llevar, y que en Tapachula no se nos permitía”.