Autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública y de Protección Civil acudieron a la comunidad de San Lucas para suspender una fiesta que se realizaba y en la cual había riesgo de aglomeración de personas.
“Por medio de un reporte anónimo a la Central de Atención a Llamadas de Emergencia 911, se notificó sobre este evento, de inmediato personal de Policía Municipal, Protección Civil e inspectores del Ayuntamiento arribaron a la comunidad donde corroboraron los hechos.”, explicó el ayuntamiento de San Miguel de Allende.
Reportes indican que las autoridades pidieron a los presentes desalojar el lugar pero éstos se negaron y se tornaron violentos, por lo que las autoridades abandonaron el lugar para salvaguardar su integridad.
“Cerca de 300 personas se encontraban reunidas, además de algunos puestos y un conjunto musical que se presentaría más tarde. Las autoridades solicitaron a los asistentes desalojar el lugar, sin embargo, tomaron un comportamiento renuente y comenzaron a amedrentar a los servidores públicos, quienes tuvieron que abandonar el sitio para salvaguardar su integridad física.”