(18 de septiembre, 2016. Revolución TRESPUNTOCERO).- A sólo días de que se cumplan dos años de impunidad en el caso Ayotzinapa, el gobierno de Peña Nieto decidió premiar a uno de los inventores de la “verdad histórica”: Tomás Zerón de Lucio, quien estratégicamente renunció el pasado 14 de septiembre a su cargo en la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la Procuraduría General de la República (PGR), para ocupar el puesto de secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional (CNS).
Los padres de los 43 estudiantes desaparecidos anunciaron hace semanas su retiro de la mesa de diálogo con el gobierno federal en tanto no se sancionara a Zerón por manipular las investigaciones del caso Iguala, razón suficiente para no volver a confiar en él, como funcionario público.
Sin embargo, la reciente decisión de Peña es otra bofetada contra los familiares de los 43 y la sociedad mexicana, ya que a casi dos años de la tragedia, no han obtenido respuestas y mucho menos, la verdad sobre los hechos acontecidos la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
Ante la nefasta decisión gubernamental, Mario César González, padre del normalista desaparecido César Manuel González, denunció en entrevista con Revolución TRESPUNTOCERO que es una burla el nombramiento de Zerón en la CNS y aseguró que hasta no haber castigo ejemplar contra el funcionario, los familiares de los 43 rechazan reanudar el diálogo con las autoridades, quienes se han encargado de obstaculizar la investigación del caso Ayotzinapa, al mantener en líneas como el incendio en el basurero de Cocula –mismo que científicamente ha desmentido que se haya podido incinerar a los normalistas- o el rechazo de prórroga de permanencia del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) y la puesta en marcha de sus recomendaciones.
“Es indignante, después de que tiene una investigación abierta, que todavía lo premien con un cargo más alto; es una burla para nosotros, pero no sólo una burla para los 43 padres de familia, es una burla todos los mexicanos”, recalcó Manuel González.
Cabe mencionar que el ahora protegido de Peña Nieto fue uno de los colaboradores cercanos del exsecretario de seguridad pública federal, Genaro García Luna; sin embargo, en 2007, fue cesado de su cargo como coordinador de Control Policial por haber mostrado falta de coordinación en los hechos violentos en Cananea, Sonora, donde alrededor de 50 sujetos armados plagiaron y asesinaron a una decena de personas con plena libertad sin que ningún tipo de elemento policiaco interviniera en la masacre.
El cuestionamiento sobre el profesionalismo de Zerón continúa y ahora es acusado de haber manipulado las pruebas del basurero de Cocula con lo que se pudo sustentar la “verdad histórica”, pese a que científicos a nivel nacional e internacional, han declarado que esa versión es una mentira.
Anteriormente, en entrevista con Revolución TRESPUNTOCERO, el senador Manuel Bartlett denunció que el gobierno de Peña, junto con asesores como Zerón, son unos delincuentes que se han encargado de modificar la investigación donde ya se han planteado pruebas y argumentos.
“Eso no lo puede tapar Peña Nieto, el exprocurador, el tal Zerón ni ninguno de ellos. Están realmente en una actitud absurda, en medio de un pantano pero diciendo que todo lo han hecho bien”, recalcó.
En tanto, Vidulfo Rosales, representante legal de los padres de los 43, ha manifestado que la investigación del caso Iguala presenta irregularidades manifiestas, visibles y notables, pruebas suficientes para sancionar a Zerón.
Representantes del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh) opinaron para este medio que el caso de Tomás Zerón, es una crónica de impunidad y una “absolución anunciada”.
Pese a la evidencia en contra de Zerón, una vez más el gobierno priista demuestra que no importan las acciones cometidas por los funcionarios. Si son cercanos a la oligarquía, nada les puede suceder.
Sigue vivo un México donde se premia a los delincuentes y se pisotea al resto de la sociedad.