El Gobierno de Israel anunció una reducción significativa de sus operaciones militares en la franja de Gaza luego de que Estados Unidos, a través de su presidente Donald Trump, exigiera la paralización “inmediata” de los bombardeos, en un contexto de señales de aparente acercamiento entre las partes para aplicar un plan de paz.

Medios oficiales israelíes informaron que, tras evaluaciones nocturnas y negociaciones con representantes estadounidenses, el liderazgo político dio instrucciones a las Fuerzas de Defensa de Israel para reducir la actividad en Gaza “al mínimo” y llevar a cabo solo acciones defensivas en el sector. La emisora militar Galei Tzahal difundió el anuncio como parte de la instrucción técnica al ejército.

La reacción de la Casa Blanca fue explícita: Trump celebró la aceptación parcial del ultimátum —atribuyéndole a Hamas una disposición a avanzar— y publicó en Truth Social:
“Creo que están listos para una paz duradera. Israel debe detener de inmediato el bombardeo de Gaza para que podamos liberar a los rehenes de forma segura y rápida. Ahora es demasiado peligroso hacerlo”.
Fuentes oficiales en Tel Aviv registraron sorpresa en el primer ministro Benjamín Netanyahu, quien inicialmente interpretó la respuesta de Hamas como un rechazo a la propuesta estadounidense; sin embargo, la oficina del primer ministro emitió posteriormente un comunicado en el que señaló que Israel está preparado para “la implementación inmediata de la primera etapa del plan” que contempla la liberación de rehenes. El texto oficial añadió que se trabajará “en plena cooperación con el presidente y su equipo para poner fin a la guerra de acuerdo con los principios establecidos por Israel”.

En paralelo, la Casa Blanca difundió un mensaje en video en el que Trump calificó la jornada como un “gran día” y agradeció a los países que contribuyeron a los esfuerzos por la paz en Medio Oriente, al tiempo que advirtió previamente, en tono durísimo, sobre la posibilidad de castigo extremo si el plan no era aceptado.

Al cierre de la información disponible, las autoridades militares israelíes limitaban sus acciones ofensivas mientras se avanzaba en las conversaciones políticas y diplomáticas destinadas a concretar las fases iniciales del acuerdo que permitiría, entre otros puntos, pasos para la liberación de rehenes.