Entre los créditos a la palabra para empresas familiares y a empresarios solidarios, el gobierno federal ha dispersado en apenas 25 días más de 11 mil millones de pesos, para mitigar el impacto económico derivado de la emergencia sanitaria por el COVID-19.
En conferencia de prensa en Palacio Nacional, la secretaria de Economía, Graciela Márquez Colín, informó sobre el avance del millón de créditos a la palabra para Empresas Familiares, mismos que ya se han registrado y aprobado a igual número de personas, y que hasta el lunes 18 de mayo, se pagaron a 277 mil 478 beneficiarios, lo que en total significó una dispersión de más de seis mil 900 millones de pesos.
Reconoció que la dispersión de créditos de 25 mil pesos por familia, avanza a través de una logística de citas en los bancos Azteca, Banorte y Santander, con la finalidad de respetar la sana distancia y de esta manera evitar aglomeraciones y contagios.
A su vez, el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo Aburto, dio cuenta de los créditos a la palabra del Empresario Solidario, el cual ya concluyó el 15 de mayo pasado, pero se otorgó a 191 mil 181 empresarios con un monto de cuatro mil 779 millones de pesos.
Sobre este crédito a la palabra, el funcionario federal habló de los 46 mil créditos que fueron rechazados por problemas en las cuentas bancarias, por estar canceladas, bloqueadas, por no coincidir la CLABE interbancaria, o incluso porque la tarjeta pertenecía a una persona ajena.
Por ello, dio a conocer que con la finalidad de que los recursos lleguen a los beneficiarios, el IMSS envió cuatro mil 624 correos para tratar de solucionar los obstáculos que impidieron que los empresarios solidarios recibieran el crédito.
En cuanto a los nuevos créditos que se ofrecen a las 22 mil 300 trabajadoras del hogar y a los 23 mil 717 trabajadoras independientes, Robledo Aburto indicó que en este financiamiento ya se han colocado dos mil 412 apoyos, en los cuales además se proporciona información para que los beneficiarios puedan sacar de manera electrónica una cuenta bancaria con Banorte y no sea la falta de una tarjeta la que les impida recibir el apoyo.
En su oportunidad, la coordinadora de Tandas para el Bienestar, Rocío Mejía, habló del programa prioritario de crédito a la palabra, mediante el cual buscan impulsar la economía popular con préstamos que van de seis mil a 20 mil pesos, sin garantías, sin avales, tasa de interés cero, sin intermediarios, distribuidos en zonas urbanas y semi urbanas de alta y muy alta marginación y cuya meta para este 2020 será entregar 508 mil tandas.
