Nuno Matos, director de HSBC México, aseguró que el gobierno federal sí puede hacer crecer la economía nacional hasta en cuatro por ciento, por lo que consideró que 2020 será un año crucial para el relanzamiento.
Recordó que los indicadores macros son positivos y debe haber mayor confianza de los inversionistas y el proceso de relanzamiento del acuerdo comercial con América del Norte denominado el T-MEC.
“Tenemos una administración que ha demostrado ser muy responsable a nivel macro, muy responsable de las cuentas públicas, con la autonomía del banco central, claramente enfocada a tres temas fundamentales: la inseguridad, la corrupción, y la distribución más equitativa de la riqueza, esos factores son fundamentales para tener un mayor crecimiento sostenible”, expuso el directivo del banco internacional.
Señaló que HSBC tiene un pronóstico de crecimiento para México de uno por ciento y podría ser mayor hasta alcanzar el tres o el cuatro por ciento en los próximos cuatro años.
El banquero aseveró que 2019 fue un año en el que se tuvieron que preparar y “ahora sí, 2020 sería de esperar que la iniciativa privada, más la inversión pública, pudiera realmente comandar una agenda de inversión tanto en infraestructura como privada para relanzar el crecimiento de México”.
“Nosotros no tenemos un límite, tenemos apetito para todos los proyectos que tengan sentido, que tengan un marco jurídico adecuado, que en definitivo sean bancables, tenemos mucho apetito, hemos anunciado 120,000 millones de pesos, pero si tuviéramos oportunidad de invertir más lo haríamos, no hay ninguna restricción, al contrario, hay apetito de hacer lo más posible”, añadió el representante de HSBC.
“Pemex ha tenido un 2019 donde ha puesto la casa en orden, y lo ha comunicado de forma muy clara al mercado, por un lado ha refinanciado su deuda a largo plazo, por lo tanto hoy el perfil de deuda de Pemex es mucho mejor que hace 12 meses, y a nivel operativo se ha dedicado a eliminar la corrupción, a reducir el huachicol y a incrementar la producción”, agregó el banquero.