Sin rumbo, a la deriva y sobre todo sin proyecto, los conservadores transitan hacia el 2024 buscando a un abanderado que tenga cierta popularidad y que despierte entusiasmo al menos entre los suyos.
Por eso grupos empresariales y políticos cercanos al salinismo han puesto sobre la mesa el nombre de Luis Donaldo Colosio Riojas, alcalde de Monterrey. No requieren o pretenden a un líder sino a un gerente al estilo Enrique Peña Nieto que reciba órdenes y trabaje para los intereses de la minoría que gobernó el país durante décadas. En palabras de AMLO, buscan un pelele.
Claro que en el caso de Colosio la idea es perversa porque el mismo régimen que eliminó de forma cruel y despiadada a su padre en 1994 porque se había salido del guión de la continudad del autoritarismo neoliberal ahora quiere utilizar su apellido para reconquistar el poder.
¿Cuál es el mérito de Colosio Riojas para que sus promotores lo consideren como presidenciable en 2024? ¿Qué ha hecho como efímero gobernante, cuáles sus logros, sus políticas públicas y su proyecto de Nación? Preguntas serias sin respuestas convincentes.
Y es que Colosio tiene derecho a ejercer la profesión que quiera y pretender crecer como político, pero está claro que los neoliberales lo proponen no por honesto, eficaz y experimentado sino bajo la idea de manejar un títere sin mérito alguno. Quienes lo impulsan parten de la premisa que la gente votaría por su apellido en automático. Subyace en ellos la idea de que la gente es tonta, siguen menospreciando la inteligencia del pueblo y por eso continúan perdiendo elecciones.
Peor aún la frivolidad de Donaldo Colosio Riojas quedó expuesta en un video en el que se le observa gobernando Monterrey a control remoto desde un restaurante de Nueva York en aparente estado de ebriedad lo cual calificó como un inconveniente “técnico”.
Frivolidad que se replica en otros integrantes de Movimiento Ciudadano que especialmente en Nuevo León son considerados los juniors de la política naranja. Así pues Colosio fue exhibido compitiendo al tú por tú con el gobernador Samuel García, fosfo, fosfo, qué díficil chamba.
Y es que sin Wifi Samuel García y Luis Donaldo Colosio Riojas no gobernarían.
Por eso, si los habitantes de Nuevo León no quieren que Samuel García y Luis Donaldo Colosio Riojas hagan daño no es necesario revocarles el mandato… solo cortarles el WiFi.
Pero lejos de madurar y ofrecer resultados los cercanos a Colosio han salido a arroparlo. “Le tienen pavor a Colosio Riojas”, dicen los suyos… salvo que se trate de una competencia de tragos.
Como sea, es notorio que desde el conservadurismo le van a apostar a un candidato o candidata al estilo “producto milagro” e imponerlo a billetazos como a Peña Nieto.
El asunto es que la sociedad mexicana está cada vez más politizada y será difícil que muchos caigan en la trampa de creerse semejante cuento. Por ahora la evidencia indica que lo más seguro es que se cumpla la profecía de AMLO: la 4T seguirá ganando elecciones por paliza.


