Por: Zazil Carreras
@Zazcarreras3_0
El País es uno de los diarios con mayor tiraje a nivel mundial. Su información es fuente no solo en España, sino en diversos países y cuenta aproximadamente con 2 millones, 221 mil lectores diariamente.
Aún con la gran experiencia y capacidad que estos datos significan, el pasado 24 de enero pasará a la historia como el día en que El País hizo pública su línea antichavista, cometiendo uno de los peores errores del mundo periodístico: no verificar la información.
En la búsqueda de un bombazo de ventas, la dirección del diario fue engañada y compró una fotografía falsa de Hugo Chávez en una mesa de operaciones. La foto en realidad fue una toma extraída de un video médico demostrativo del año 2008 en el que se ve a un paciente, con rasgos parecidos a los del presidente venezolano, durante una intervención quirúrgica.
El Libro de estilo de este diario establece que “las fotografías con imágenes desagradables solo se publicarán cuando añadan información”, por lo que el diario justificó la publicación de esta imagen.
El País quiso dejar bien claro a sus lectores que no había podido verificar las circunstancias en que fue hecha la foto, dadas las restricciones informativas que aplica el régimen de Cuba.
Su corresponsal en la isla, Yoani Sánchez es, además, una polémica bloguera vetada por las fuentes de información oficiales, por lo que El País justifica que “Tratar de que Yoani Sánchez se pusiese en contacto con cualquier fuente habría supuesto un riesgo para ella y las personas supuestamente implicadas en la foto.”
El diario explicó que la agencia que les vendió el material aseguró que había sido obtenido por “una enfermera cubana” que podría estar en peligro si se descubría su identidad. “Creímos que era una salvaguarda de protección –dice El País-. Era una enfermera que se estaba jugando la vida”.
“Era una noticia relevante porque el Gobierno venezolano no informa sobre la salud de su presidente” y “su dolencia está rodeada de secretismo”, justificaron.
De esta forma El País responsabiliza de manera indirecta tanto al gobierno cubano como al venezolano por la publicación de la fotografía. Si bien han aceptado los errores en la verificación de datos, los excusan mencionando las restricciones bajo las que se encuentra su corresponsal cubana, quien en diversas ocasiones ha denunciado al régimen y quien, sin embargo, tiene un modo de vida contrario a sus denuncias.
El diario también responsabiliza al gobierno venezolano por la falta de información en torno al estado de salud del presidente Hugo Chávez, aunque, diariamente el gobierno venezolano emite actualizaciones que –si bien no son específicas–, sí brindan información suficiente que evite a los medios caer en este tipo de “errores”.