(08 de julio, 2014).- Hoy habrá sesión en la cámara de diputados para la aprobación, como cámara revisora, de las leyes secundarias en materia de telecomunicaciones. Para dar este paso, en dos sendos desplegados los senadores justificaron su aprobación señalando “grandes beneficios”. Uno de ellos señala que sólo hasta el 31 de diciembre de este año se pagarán las llamadas de larga distancia tanto en telefonía fija como móvil. Al parecer nuestro legisladores ignoran que tal registro ya es mínimo porque se utiliza el internet que permite, entre otros, que no sólo se hablen sino que se vean a través de las computadoras; que también existen mensajes de texto; que hay Whats App, que son tantos los avances que su oferta es ridícula; dicen que se elimina cualquier censura en Internet y se garantiza la individualidad de las comunicaciones y protección de datos personales.
De ahí que pueda asegurarse que no están enterados de que hay bloqueos que se generan desde Estados Unidos, que alteran páginas o que las eliminan sin que sus leyes puedan hacer nada; los servidores instalados y en posesión satelital de otros países no son garantía de ninguna individualidad y eso de los datos personales habrá que pedirle a los de Hacienda que lo respeten y también a los de Gobernación porque todos se solicitan y terminan, como los registros electorales, en gran venta de plaza en Tepito, sobre todo en tiempos en los que los partidos se arman con todo lo que pueden para los procesos. Además de que es inservible su ofrecimiento ante las leyes dictadas que nos hacen practicar “actividades sospechosas” o convertirnos en auténticos soplones.
Necesitaron leyes para decirnos a los consumidores que podemos cambiarnos de empresa telefónica sin costo y sin revanchas; que se puede solicitar que no cambien las condiciones contratadas sin el debido consentimiento. Lo primero tendría que ser sólo una comunicación enviada a los empresarios del ramo para indicarles que los usuarios pueden hacer sus cambios y que en caso de hacerles algún cobro serán sancionados. De igual manera imponerse multas a quienes hagan cambios sin el consentimiento del usuario. O sea que nos venden como beneficio lo que ha sido el abuso de otros a los cuales siguen sin aplicarles ningún castigo y sin referencia a cancelarles las concesiones.
Habrá servicio telefónico aun y cuando viva en el DF y vaya de visita con sus parientes a Tecamachalco, a Satélite o a Nezahualcóyotl; van a descontar de los cobros las fallas imputables a las telefónicas y ¿cuándo se adquieren paquetes, que son la mayoría?; van a dar receptores y decodificadores para lograr la televisión digital a más tardar el último día de este año. Ya podrá saber de sus adeudos por teléfono; que no le cancelen las prepago; etcétera. O sea de nuevo espejitos por oro. De la fibra óptica, de banda ancha,de las conexiones que generan grandes utilidades, de las adjudicaciones a nuevas televisoras, de dar por terminado el término monopolio o duopolio, nada y, de los contenidos y de la regulación de éstos, menos. Tampoco del terreno satelital hacen mención y de las adjudicaciones de éstos.
La aprobación senatorial se obtuvo con la aplanadora a toda marcha, en una sesión en donde se acataba la única voluntad que cuenta, la del inquilino de Los Pinos, lugar desde donde hicieron llegar el documento final solo para ser votado, sin más ni más y mucho menos, menos. Queda claro que en estos dictámenes los grandes triunfadores son los televisosdestapadores.