(09 de noviembre, 2014)
I.- La complicidad de Calderón y su esposa Margarita Zavala pospusieron resolver el incendio de la Guardería ABC en Hermosillo, Sonora, porque la prima hermana de ella era la accionaria principal de la concesión, y porque decidieron proteger al entonces desgobernador que se embolsó más de 50 mil millones de pesos del programa “Sonora progresa”, y cuya documentación mandó esconder en un almacén contiguo a la guardería. Por la mañana del 5 de junio de 2009, Bours, socio de la empresa Bachoco, que es casi un monopolio, con el pretexto de incinerar papelería inútil, ordenó prenderle fuego, a sabiendas de que la estancia infantil tenía techo altamente inflamable. Entonces era presidente municipal hermosillense el actual senador Ernesto (alias “El Borrego”) Gándara que aspira a ser el candidato del PRI a la gubernatura. La maniobra de Bours fue que se incendiara la guardería para distraer la atención y el fuego devoró tanto la documentación comprometedora, como a 49 niños dejando a 74 más con lesiones físicas y mentales de por vida. Como dato al margen, el chofer-ejecutor del incendio fue encontrado asesinado, tres meses después.
II.- El homicidio de esos niños, cuyas edades fluctuaban entre recién nacidos y no más de 3 años, después de 5 años y medio no ha sido atendido por Peña, ya que la PGR de Murillo Káram, no obstante las demandas y pruebas de que el fuego fue provocado, sigue sin castigar a los responsables. Calderón y Margarita son cómplices y por eso nada hicieron. El desgobernador Bours, un ratero y criminal peor que cualquier narco, también se fue del cargo y anda “picando piedra” para ver si lo vuelven a ocupar en el PRI. El señor Gándara Camou hace como si nada tuviera que ver con ese genocidio. ¿Y Peña? Este, en su campaña fue a Sonora y se comprometió a darle curso a la exigencia de justicia de los padres de esos niños. ¿Habrá complicidad del peñismo con el calderonismo?
III.- Agotadas todas las instancias, incluyendo a la Suprema Corte que también se puso de parte de Bours y el calderonismo, y después de organizar toda clase protestas pacíficas, los familiares de esos niños han solicitado entrevistarse con Peña y éste los ha remitido con Luis Nava Miranda que sólo les da largas. Y hartos de la negligencia, complicidad y denegación de justicia que las autoridades mexicanas han mostrado todo este tiempo, decidieron recurrir a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. El Herodes-Bours que ordenó el incendio, la prima hermana de Margarita Zavala –quien nuevamente está en la escena para pescar una diputación federal–, y toda la agrupación que explotaba la guardería, son señalados en la denuncia internacional. Los familiares fueron recibidos por el secretario ejecutivo de la organización en Washington a quien entregaron la denuncia, con la esperanza de que emitan la resolución que obligue a Peña para que su PGR, atendiendo los peritajes que determinan que el incendio fue intencional, proceda penal y civilmente contra esos asesinos viven en la impunidad, protegidos por el gobierno peñista.