Comienza marzo y con el inicio de este mes tan emblemático en la lucha de los derechos de las mujeres alrededor del mundo, las convocatorias a diversos eventos en el marco del 8M comienzan a aparecer. No obstante, aun en pleno 2022 existe cierto grado de desconocimiento de qué es lo que realmente se conmemora en el día internacional de la mujer y cuál es la mejor forma de recordar a todas aquellas mujeres que a lo largo de la historia han luchado por la reivindicación de nuestros derechos.
El 8 de marzo de 1857, en Nueva York cientos de mujeres trabajadoras de la industria textil se concentraron con el objetivo de demandar la necesidad de dignificar los salarios y las condiciones laborales de las fábricas en las que trabajan. El mismo día, pero en el año 1875, cientos de mujeres que trabajaban en una fábrica textil neoyorquina, participaron en una manifestación contra los bajos salarios y las “inhumanas” condiciones laborales. Durante la marcha, se impuso la brutalidad policial, trayendo como consecuencia la muerte de 120 mujeres, además de que en dicha marcha surgió la fundación del primer sindicato femenino.
Nuevamente el 8 de marzo, pero de 1909, en Chicago tuvo lugar una marcha bajo el nombre “pan y rosas” en la que las mujeres reclamaban no solo la reivindicación de las condiciones laborales, sino que también pedían el derecho al voto femenino.
En el año 1911, de nuevo en Nueva York, se produjo un gran incendio en la fábrica textil Triangle Shirtwaist, en la que trabajaban centenares de mujeres, en este trágico día la mayoría de las trabajadoras quedaron atrapadas dentro de la fábrica, en el centro del incendio, porque los propietarios habían sellado las salidas para evitar los robos por parte de las trabajadoras. Esa madrugada, más de cien mujeres murieron quemadas y otras fallecieron al tratar de escapar por las ventanas. La tragedia, provocó el nacimiento del Sindicato Internacional de Mujeres Trabajadoras Textiles; siendo importante también recalcar que las telas con las que trabajaban las mujeres en esa fábrica eran moradas y, con el incendio, una gran masa de humo morado cubrió la ciudad; por ello se cree que el movimiento feminista está ligado al color morado.
También en el año 1911 mujeres de Alemania, Austria, Suiza y Dinamarca, decidieron salir a la calle para pedir su derecho a ejercer el voto, a optar a cargos públicos, a trabajar y a la formación profesional. En el año 1912, se sumaron Francia, Países Bajos y Suecia; en 1913 incluso Rusia. En el año 1914, la peculiaridad de la situación política, provocó que el 8 de marzo se celebrase como un acto de reivindicación pacifista, contra la guerra que amenazaba a Europa.
En España, fue hasta el año 1976 cuando se produjo la primera manifestación con motivo del día de la Mujer, pero ésta fue reprimida por las fuerzas policiales, ya que no estaba autorizada. En el año 1977, la ONU anunció la proclamación del 8M como el Día para los Derechos de la Mujer y la Paz Internacional. Ese mismo año, España celebró la primera marcha autorizada con motivo del 8M, donde las mujeres españolas, aprovecharon para demandar cuestiones como la necesidad de recibir educación sexual, la legalización de la venta de anticonceptivos y la despenalización del aborto.
Así pues, el 8 de marzo, no es un día para festejar a las mujeres, ni tampoco es para felicitarlas, se busca que sea un día para reivindicar la igualdad y la justicia, las cuales, por cierto, después de más de 100 años aún no se consiguen del todo.
– Andrea Tovar Saavedra –
