La operación para la ejecución de un megafraude en el Estado de México a fin de hacer triunfar al candidato de la alianza encabezada por el PRI, Alfredo del Mazo Maza, “cueste lo que cueste”, en la próxima elección de gobernador está muy avanzada, ante la evidencia de una derrota catastrófica para el grupo político y económico del presidente Enrique Peña Nieto, pues los sondeos sobre intención del voto le dan una ventaja ya de 10 puntos porcentuales a la abanderada de Morena, Delfina Gómez Álvarez, sobre su más cercano competidor. A dos semanas de los comicios, se maquina perpetrar un fraude superior al que impuso a Felipe Calderón en la Presidencia de la República en 2006, en el cual los candidatos punteros obtengan una diferencia de menos de 1 por ciento de la votación total, como ya lo adelantó Pedro Zamudio, consejero presidente del Instituto Electoral del Estado de México, al dar a conocer la operación del PREP (Programa de Resultados Electorales Preliminares) el próximo cuatro de junio.
Lo grave no es sólo que Enrique Peña Nieto, quien todo indica trabaja ya tiempo completo de jefe de campaña de su primazo Del Mazo, candidato de la alianza PRI-PVEM-Nueva Alianza y Encuentro Social, y los integrantes de su gabinete, junto con el gobierno de Eruviel Ávila y sus funcionarios de prácticamente todos los niveles, puedan operar el fraude, como lo han venido haciendo al menos desde agosto del año pasado, sino que lo hagan impunemente, al margen de la ley y violando todas las restricciones políticas y presupuestales señaladas en la legislación electoral federal y de la entidad.
De la omisión de sus responsabilidades y competencias han pasado a la complicidad plena de prácticamente la totalidad de las autoridades electorales federales: del Instituto Nacional Electoral (INE), presidido por Lorenzo Córdova Vianello; del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), presidido por la magistrada Janine Otálora Malassis; y de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales de la PGR, encabezada por Santiago Nieto Castillo, así como las locales: del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), presidido por el propio Pedro Zamudio; del Tribunal Electoral del Estado de México (TEEM), encabezado por Jorge Arturo Sánchez Vázquez; y la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, a cargo de Alejandro Gómez Sánchez. Denuncias y evidencias para actuar las tienen de sobra en sus manos y fueron presentadas oportunamente por los representantes y dirigentes de los partidos políticos así como por ciudadanos.
Más que preocuparse en las formas de cubrir el fraude, las autoridades electorales federales y locales deberían ocuparse en desmarañar la estrategia diseñada desde la residencia oficial de Los Pinos. Podrían empezar, por ejemplo, con la estrategia desplegada por el gobierno federal para la celebración de Ferias Regionales Integrales de Servicios, donde se repartieron apoyos masivos a la población. De acuerdo con un diario capitalino, desde la Jefatura de la Oficina de la Presidencia se planeó y ejecutó la participación de diversas dependencias en un solo lugar, otorgando consultas, asesorías y servicios públicos, además del reparto de despensas de Diconsa, y de tarjetas “La efectiva”, financiadas por el gobierno mexiquense.
De acuerdo a un documento en poder de ese rotativo, en la estrategia se estableció las 24 dependencias federales participarían en al menos siete ferias de servicios, cuya primera etapa inició en agosto y concluyó en octubre de 2016. El programa Prospera se encargó del reparto de despensas y la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedue) encabezó la organización de los eventos. Se estima en al menos 33 mil 500 personas la participación de las siete ferias efectuadas el 20 de agosto, en Toluca; 3, 10 y 24 de septiembre en Valle de Bravo, Ixtlahuaca y Tultepec, así como el 1, 8 y 15 de octubre de 2016 en Chalco, Huixquilucan y Zinacantepec, respectivamente. A esos eventos asistieron tanto el gobernador Eruviel Ávila como representantes directos de Peña Nieto, incluido Francisco Guzmán, jefe de la Oficina de la Presidencia.
También podrían ocuparse de investigar las promesas de Alfredo del Mazo de pagar los votos obtenidos el 4 de junio con un salario. A cambio de fotocopias de la credencial de elector, promotores del primazo de Peña Nieto reparten en diversos municipios de la entidad, como Ecatepec, Jaltenco y Coacalco, la Tarjeta Salario Rosa y prometen depositar ahí el beneficio económico, cuyo monto no está especificado. La entrega de las tarjetas inició desde el pasado 15 de mayo. Del Mazo justifica en su campaña es un apoyo económico a las amas de casa como reconocimiento por el trabajo realizado en su hogar y con su familia.
PRD DIVIDE EL VOTO OPOSITOR EN EDOMEX
Juan Zepeda, candidato del PRD al gobierno del Estado de México, está haciendo un excelente trabajo para dividir el sufragio de la oposición ante la caída en la intención del voto de la abanderada del PAN, Josefina Vázquez Mota. En su propio terruño, el municipio de Nezahualcóyotl, el dirigente nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador le dio un plazo de cuatro días, que vencen este martes, para que apoye a Delfina Gómez Álvarez, abanderada morenista.. Pero Juan Zepeda y sus seguidores se niegan a declinar y optar por un gobierno de izquierda en la tierra de Peña Nieto, con lo cual le hacen el juego al grupo Atlacomulco.
PARTIDOCRACIA, ENEMIGO PÚBLICO
Una vez exhibida en toda su dimensión la ausencia de ideología entre las fuerzas políticas actuales con el anuncio de la alianza PAN-PRD para enfrentar las elecciones en el 2018 y hacerse de la Presidencia del país, poco queda por decir si de intentar definir algún rumbo se trata. El PRI no deja de observar cualquier amenaza, cualquier indicativo de perder de nuevo el gran poder, de minimizar cada paso dado por una oposición a la cual no puede ver como tal, pues han sido en todo momento sus aliados a conveniencia y eso ha quedado muy, muy claro, al aprobarse por unos o por otros las llamadas reformas estructurales.
Sobre lo calificado como “frente opositor”, resulta ser que la lideresa de los perredistas, Alejandra Barrales, ni siquiera les pidió su opinión a los más representativos de su organización, tampoco a otros dirigentes, ignoró a los estatales y locales. Algunos solaztequistas confiesan preferir mantenerse aliados con el PRI. ¿Puede considerarse alguna capacidad para marcar el futuro inmediato y mediato del país con esos antecedentes? Y, si a lo anterior le agregamos la competencia electoral transformada en maratón de corrupción, no se encuentran salidas.
En ningún órgano del PRD existe discusión formal que “acredite a la presidenta nacional a hablar de un frente amplio al 2018. (Alejandra Barrales) como presidenta está obligada a dar posiciones institucionales, no a ocurrencias de coyunturas o declaraciones aventuradas suyas”, subrayó Vladimir Aguilar, coordinador del Foro Nuevo Sol, quien advirtió: ni Ricardo Anaya ni Margarita Zavala ni Rafael Moreno Valle se deben hacer ilusiones de que el PRD va ir aliado con un panista al frente en las elecciones presidenciales.
Carlos Sotelo, dirigente de la corriente Patria Digna, publicó en sus redes sociales: es una vergüenza la pretensión de una alianza con el PAN. “El PAN como el PRI es igualmente responsable del desastre que vive el país; una vergüenza la pretensión de alianza publicada hoy por Alejandra Barrales. Ningún órgano del PRD México conoce lo que opinó (la presidenta) en su anunciada reunión con Ricardo Anaya del PAN. Es, por tanto, lo que se diga, a título personal”, indicó.
El líder de la corriente Izquierda Democrática Nacional (IDN), René Bejarano, le envió un mensaje directo a Alejandra Barrales: “Hola. No comparto tu pronunciamiento del día de hoy (sábado) acerca del llamado “Frente Amplio”. Es tan sólo un disfraz de la alianza con el PAN. Te aviso que nos deslindaremos de tu actuación. Ojalá nos hubieras consultado”.
Y para el senador Miguel Barbosa, vicecoordinador político del PT en la Cámara alta, el frente amplio opositor al cual convoca Barrales y Anaya es un “error político” que únicamente busca detener a Andrés Manuel López Obrador en la contienda por la Presidencia de 2018. “El anuncio de una alianza PAN-PRD no es contra el PRI, es contra Andrés Manuel López Obrador”. El ex perredista aseguró que más allá de los resultados en el Estado de México, en el 2018, el PRI ya no compite en esa elección.
Para el PRI están debidamente anunciadas las derrotas con todo y la exhibición de supuesta corrupción del candidato panista a la gubernatura coahuilense quien, obviamente, se mantiene a la delantera en encuestas realizadas por diversas empresas y pagadas por los partidos políticos participantes en el próximo proceso electoral. Según aseguran, Guillermo Anaya cuanta con una fortuna en dólares depositada en el Banco Central de Barbados. El saldo reportado es de 32 millones de dólares sumados a los 211 millones de pesos en dos cuentas en Banorte. Ningún registro de ella aparece en su declaración 3de3.
Nada cambiará en tanto sigamos secuestrados por los partidos políticos, sean estas organizaciones quienes pongan e impongan candidatos y se deje a los ciudadanos como única opción votar por el menos peor, el de pocas acusaciones de corrupción, quien tenga menos escándalos en su vida personal y si acabó la instrucción primaria, mejor.
Megafraude electoral a la vista en el Edomex; Barrales y los chuchos, sepultan a perredismo
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