Por: Redacción
Las mujeres han ganado terreno en el ámbito laboral sin embargo, no les ha sido sencillo incorporarse a un mundo que de ante mano se ha concebido para varones. Aún hay expresiones y pautas que desembocan en la falta de equidad en diversos ámbitos como el laboral. Por ejemplo, hay casos en que los salarios no son los mismos entre hombres y mujeres desempeñando las mismas funciones, o incluso casos en que las mujeres no son contempladas en puestos de alto liderazgo.
En Chile, de acuerdo a un estudio realizado por la consultora internacional Mercer, sólo el 2% de las personas que ocupan puestos gerenciales son mujeres; un 8% en puestos directivos pero, conforme va descendiendo la jerarquía comienza a aumentar el porcentaje.
Costa Rica no es la excepción ya que el porcentaje de mujeres en cargos jerárquicos empresariales es minoritaria de acuerdo a un informe del Programa para el Desarrollo de la Mujer Empresaria (Pdme) de la Cámara de Comercio.
En este estudio se indica que sólo el 13% de las presidencias y el 12% de las gerencias de las empresas medianas está representado por mujeres mientras que sólo el 3% de las grandes compañías costarricenses contemplan a las mujeres en puestos de máximo mando.
Mientras tanto en Uruguay, en la historia de los gabinetes ministeriales, la participación de las mujeres alcanza un 4%.
Sin embargo, tenemos que en países de Sudáfrica el porcentaje es mayor puesto que el 28% de las presidencias de grandes compañías está representada por mujeres.
Aún resta mucho por hacer para que las empresas en Latinoamérica consideren a las mujeres en puestos gerenciales y directivos pero también es necesario que las mismas mujeres pretendan llegar más alto en su vida profesional.
