(18 de marzo, 2015. Revolución TRESPUNTOCERO).- A la ola de despidos que acompañaron la salida de Carmen Aristegui de Noticias MVS, luego de la destitución de los integrantes del equipo de investigaciones especiales, Daniel Lizárraga e Irving Huerta, además del equipo de colaboradores que laboraban con la popular conductora, ayer se finiquitó la de Adriana Buentello y Amayalli Mota, quienes siendo trabajadoras de la misma, se sumaron a la inconformidad y manifestaron públicamente su postura.
La tarde de ayer, luego de haber subido fotos y videos a sus redes sociales de la manifestación donde entregaron más de 179 mil firmas para la restitución de Aristegui, Buentello y Mota fueron llamadas a la oficina de Héctor Gutiérrez, responsable del área web, donde se les notificó que por “la situación que atraviesa Grupo MVS”, prescindirían de sus servicios y les pidieron que ya no se presentaran a laborar.
“Hasta donde yo sabía, nuestro jefe no estaba enterado de nuestro apoyo; creemos que fue una decisión de más arriba”, señaló una de ellas a su salida del consorcio de comunicación. Ahí dejaron constancia que se trató de una destitución “selectiva”.
Aristegui recientemente publicó el escándalo de corrupción –o “conflicto de intereses”– que involucra a Enrique Peña Nieto, su esposa Angélica Rivera y el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso, con la constructora Grupo Higa, que en el sexenio de Peña como gobernador del Estado de México, había sido beneficiada con multimillonarios contratos y nuevamente lo sería con la construcción del tren México-Querétaro. Dicha empresa recientemente había dado en comodato millonarias casas.
En entrevista para Revolución TRESPUNTOCERO, ambas trabajadoras despedidas manifestaron su postura:
‒¿Qué fue lo que pasó?
‒Pues mira, llegando yo a la empresa, me senté en mi lugar y mi jefe nos mandó a llamar a Adriana y a mí a la oficina de comunicación, cuya jefa es Sheyla Amador; ahí estaba una persona de recursos humanos, nos sentaron y nos dijeron que la empresa, por ‘recortes’ y la situación por la que atraviesa el consorcio, iba a tener que tomar medidas con el personal, entonces que presidían del servicio de ambas ‒sostuvo Amayalli Mota.
‒¿Ustedes habían manifestado posturas a favor de Carmen?
‒Desde el momento en que hubo manifestaciones, subí a mis redes sociales videos y fotos de lo que estaba pasando afuera del edificio. Eso pasó el día de ayer. La verdad es que desde un principio, mantuve mi postura a favor de Carmen y considero que lo que hizo la empresa fue algo desleal con ella.
“Inclusive fui yo quien subió el comunicado el domingo por la noche, no me lo esperaba, todavía pensaba que Carmen iba a estar el lunes al aire, pero el hecho de que no le permitieran estar en su último programa, pues se me hace desleal y como una puñalada por la espalda”, afirmó Mota, quien hasta el lunes pasado ocupaba el puesto de “administradora web” del portal de Noticias de MVS.
‒Si nos tomó un poquito por sorpresa –aseveró Adriana Buentello, a las afueras de Grupo MVS– aunque sabíamos que iban a tomar represalias contra algunos de nosotros. Sí supiste que hackearon la página, ¿no? Eso fue el sábado, para el lunes se tomaron medidas de seguridad y cambiaron las cuentas, el administrador. Por ahí hubo algún comentario de que todo iba a estar más estricto. Con la marcha que hubo el lunes, nosotros hicimos más patente nuestra solidaridad; fuimos exclusivamente Amayalli y yo en ese momento.
‒¿Las culparon por el hackeo de la cuenta de Twitter?
‒Sí –respondió Amayalli– hubo una junta de reporteros y de toda el área de noticias, donde Alejandro Vega, que es el director de noticias, dijo que respaldaba a Héctor Gutiérrez, del equipo web, y que confiaba en nosotros y nosotras. Porque había sospechas y rumores de que posiblemente alguien del equipo, había ayudado a que hackearan el sitio.
‒¿Creen que esto sea un acto de intimidación para sus demás compañeros?
‒Pues mira, yo creo que sí. Ahorita no te puedo decir con exactitud qué es lo que busca mi empresa, no se sabe. Aunque no lo quieran aceptar, Noticas MVS lo hacía Carmen. Desde un principio ella fue la que forjó ese espacio. Ahora por los negocios que traigan entre manos, por la situación política del país, pues esa es la respuesta: quitar a la gente incómoda. Entonces, desde este punto de vista si me parece que es un acto de intimidación –finalizó Adriana, quien hasta ayer, fungía como Community Manager de la empresa.
