(20 de noviembre, 2013) Marcelo Ebrard, ex jefe de Gobierno de la Ciudad de México y contendiente por la presidencia del Partido de la Revolución Democrática (PRD), dijo que su partido definirá una coyuntura inaplazable en el Consejo Nacional, la pugna entre dos modelos: continuidad o cambio. Y establecerá el rumbo de la elección interna.
El PRD se ha caracterizado por la convulsión de sus procesos electorales: desde la legitimidad de los votos, hasta los acuerdos cupulares de los que surgen sus dirigentes. Ebrard propone que el nuevo presidente nacional se defina de manera homóloga a como se decidió al candidato a la presidencia de la República, a través de una consulta.
A la polémica por el método de elección se suma la propuesta de cambio de estatutos que podría sumar más contendientes por el cargo. Cuauhtémoc Cárdenas y Jesús Ortega; ambos ex dirigentes del partido, podrían, de aceptarse el cambio, competir por ocupar de nuevo la dirigencia nacional.
Cuauhtémoc Cárdenas, fundador del partido, ex candidato presidencial por el PRD, ha insistido en que sólo se postulará si su candidatura es apoyada de forma unánime por todas las corrientes, y Ebrard, ante la posibilidad de que Cárdenas cambie sus cálculos de probabilidad, dice “No declinaré”, e insiste “No nos vamos a ninguna parte”.
Ebrard y el senador perredista Alejandro Encinas presentaron una declaración conjunta en la que transparentan las propuestas que llevarán al consejo: reivindicar los principios fundacionales, diferenciarse de la esfera de poder, consulta a las bases, restituir la legalidad interna, rendición de cuentas, y restablecer los puentes de comunicación entre movimientos sociales y el partido.
Durante la conferencia de prensa, Ebrard dijo que el cambio de estatutos, que le abrirían la puerta a Cárdenas van contra los principios del PRD, y cuando se le cuestionó sobre las críticas que sus dos actuales rivales internos –Carlos Sotelo y CarlosNavarrete- han hecho sobre su propuesta de consulta, respondió “la apoyan cuando les conviene y cuando no, no” al referir que es el método “más fiable, más barato y más rápido”.