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Presunto feminicida podría salir libre por tener ‘buenas relaciones’ con el gobierno de Chiapas

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(29 de septiembre, 2016. Revolución TRESPUNTOCERO).- Según testigos del hecho, a Verónica su verdugo la golpeó severamente y de manera constante, lo que provocó su muerte. Después de esto, dos personas más, quienes fungieron como sus presuntos cómplices, a decir por los vecinos, le ayudaron a cargarla, para después llevarla al Río Grijalva, la ataron a un tronco y ahí abandonaron el cuerpo de la muchacha de 27 años.

Verónica Guadalupe Robledo Pérez, falleció de manera violenta, el 9 de septiembre pasado, en Chiapas. Al presunto feminicida lo detuvieron cuando caminaba por las cercanías del sitio donde abandonó el cuerpo de la joven.

Sin embargo su detención no es un hecho que acerque mínimamente a la familia de la justicia. Él, quien se encuentra identificado con el nombre de ‘Erick’, tiene cercanía con el Gobierno del Estado, a decir por la misma.

Puntualmente con funcionarios del DIF estatal, por lo que aseguran que tanto ellos como familiares, así como los vecinos que fueron testigos del hecho, “no pueden hacer nada”. Además, ellos, aseguran tener temor a represalias, siendo el presunto culpable, familiar de un ex presidente municipal.

Bajo condición de anonimato, uno de los vecinos del lugar, asegura a Revolución TRESPUNTOCERO: “en forma brutal la joven era golpeada una y otra vez, los gritos de ella eran fuertes, pedía que la dejara, pero poco a poco se fueron apagando.

La fuerza de los golpes y todo el daño que le estaba haciendo provocó que ella dejara de tener aliento para seguir pidiendo por su vida, se sabía que había muerto, porque dejó de quejarse, de gritar”.

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La fuente asegura que de los hechos, existe una grabación, “sí hay pruebas, un video donde se demuestran evidencias como la sangre derramada, pero imagínese lo poderosa que es la familia del hombre, que aún teniendo muchos elementos nadie se atreve a decir algo.

Tenemos miedo, aquí la impunidad en Chiapas también es producto del miedo, porque si hablamos no sabemos si seremos nosotros los siguientes, total, quién va reclamar. En el caso del feminicidio de la muchacha, quedó sangre en el lugar, ya era para que hubiera venido la autoridad a llevarse las pruebas, pero eso no pasará”.

En días posteriores al hecho, organizaciones feministas tomaron el acompañamiento del hecho, para visitar el lugar con la idea de hablar con los vecinos y ser ellos quienes recolecten las claves de la investigación, que hasta ahora las autoridades han dejado en pausa.

Esto también porque a ‘Erick’, su defensa le promovió un amparo, el cual obtuvo de manera inmediata, lo que podría hacer que logre su libertad.

“No es común ver flotando cuerpos en el Grijalva, comprobamos lo que escuchamos y alcanzamos a ver, cuando se descubrió que la joven ya sin vida se encontró a la altura del embarcadero de Chiapa de Corzo.

A la familia le avisaron ya casi para el anochecer de ese día, pero fue hasta el siguiente día por la mañana que le fue entregado el cuerpo de la joven, al parecer ella era madre de dos niños, de 1 año y 1 año y medio, este hombre no solo la mató a ella, sino a una familia entera”, comenta la fuente.

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Por su parte, la activista y feminista Rosario Rodríguez, comenta a Revolución TRESPUNTOCERO que, “en Chiapas hacer justicia en cualquier hecho delictivo es casi imposible, y cuando se trata de gente cercana al gobierno o alguna autoridad con un mínimo de poder, es prácticamente improbable que se obtenga.

En el caso de Verónica, aunque existen elementos, la gente del lugar teme por su vida o la de sus demás familiares, por eso no hablan, y por más difícil que sea, es comprensible, cuando se vive en un estado sin ley, lo único que quieres es seguir viviendo”.

Además, comenta que hoy parece ser que, el nuevo sistema de justicia penal, funge como “un elemento clave de protección a los culpables evidentes, éste podría ser un pretexto para que el señalado salga libre, tenga tiempo de escapar y el feminicidio quede impune.

Dicho sea de paso, el inculpado ha sido evidenciado en otras ocasiones, se habla de un hombre violento que ha maltratado y ejercido violencia familiar, pero pese a las denuncias sigue libre, es decir, se pelea contra un sujeto que tiene a su favor a las autoridades”.

En julio pasado, durante la celebración de un convenio entre la procuraduría chiapaneca y la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas para la investigación sobre violencia de género y feminicida, la dependencia dio a conocer que de enero al 30 de junio se habían registrado 21 víctimas de feminicidio.

“Aunque actualmente sobrepasa dicha cifra, además la cifra negra es sumamente alta, hablamos de comunidades lejanas, en donde las autoridades son machistas y si llegan a reconocer el caso será por homicidio, jamás como un feminicidio, además de esto, en muchos casos esto no se denunciará. En comunidades campesinas, la gente tiene miedo de hablar y sean a ellos a quienes los hagan prisioneros o sean víctimas de represalias por parte de los verdugos”, afirma la activista.

Además señala que se debe tomar en cuenta que de los feminicidios denunciados, a pocos se les dará seguimiento, “prefieren cansar a las familias, dando largas y dejando estancado el caso, que investigar y ejercer justicia”.

Hasta el 30 de junio, había el mismo número de Carpetas de Investigación, que casos, judicializándose 12 investigaciones y nueve más, hasta julio continuaban en trámite.

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Se mencionó que en el periodo de 2013 a 2016, Tuxtla Gutiérrez registró 19 casos, Tapachula 10, Palenque y Comitán cinco; Chiapa de Corzo, Cacahotán, Chilón, Suchiate y Ocosingo cuatro casos. Aunque aún no se ha dado a conocer una nueva cifra a septiembre de este año.

Desde hace poco más de tres años organizaciones defensoras de derechos humanos y activistas han exigido la Alerta de Género en Chiapas, en 2013, estuvo a punto de abrirse paso dicho mecanismo, teniendo ya 156 víctimas de feminicidio en 23 meses.

Sin embargo, si la Alerta de Género no se declaró, es porque en su momento, la ex secretaria del Empoderamiento de la Mujer, hoy diputada federal por el PVEM, Sasil de León Villard, declaró que “ese número no ponía en riesgo la estabilidad y la paz social en Chiapas”, por lo que fácilmente el Sistema Nacional de Prevención, Atención, Sanción y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres, votó en contra de la declaratoria.

 

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