Estas imágenes representan el reverso y el anverso de lo que son los medios de comunicación en México. Por una parte, están aquellas que muestran lo vivido hace unos minutos afuera de San Lázaro: bombas molotov, gas lacrimógeno, militares, Estado Mayor Presidencia, Policía Federal, jóvenes heridos y miembros seguridad pública quemados; por otra parte, dentro de San Lázaro, los reporteros de Televisa y Tv Azteca hacen su trabajo libres de cualquier incidente, aunque algunos testimonios afirman que el gas lacrimógeno, lanzado a los manifestantes, se ha introducido a San Lázaro. Esto ha provocado que invitados especiales y demás gente, que espera la llegada de Enrique Peña Nieto, comiencen a sentir las molestias físicas que caracteriza a esta arma de repliego.