En su columna para El Financiero, Raymundo Riva Palacio, señala que en días atrás el periodista Ricardo Alemán generó opiniones en su contra por haber ayudado a circular en redes sociales un mensaje que, incitaba al asesinato del candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador.
En ese momento Alemán expresó que, no era su intención y que se había provocado contra él la censura, por lo que Riva Palacio cuestiona si la libertad de prensa permite incitar a la violencia y al a muerte, haciendo énfasis en que la libertad de expresión tiene como límites el sentido común, la ética y la responsabilidad.
“Alemán es un buen caso de estudio sobre el discurso de odio que se vive en esta sociedad altamente polarizada.”considera al destacar que las columnas de Milenio están abusando de groserías ante la falta de control editorial “fue quien impuso la moda de cancelar la racionalidad del pensamiento y remplazarla con obscenidades, donde las mentadas de madre suplieron a la crítica argumentativa.”
Recalca que todo el discurso de odio inició cuando los medios de comunicación olvidaron su función de contribuir a la educación y la cultura, al romper los controles de contención.
Además de que las redes sociales forman parte del lugar por donde se desplaza el odio, donde los periodistas reciben mensajes de muertes frecuentemente ante el trabajo que realizan. En este contexto, el columnista de El Financierio considera que la libertad con tolerancia ha tenido regresiones sustanciales en lugar de progresar.
Recuerda que fue en el proceso electoral de 2006 cuando se rompió toda la estabilidad que existía cuando se dividieron las familias al no saber si apoyar a López Obrador o no.
“En aquellas elecciones la polarización se sintió en los correos electrónicos y en los linchamientos en la plaza pública.”
Fue seis años más tarde, cuando las redes sociales jugaron su papel en el proceso electoral, al hacer el movimiento #YoSoy132 en donde el resentimiento acumulado de seis años atrás potenció la indignación y las ganas de venganza.
Y finalmente en el actual proceso electoral, en donde las redes sociales, reproducen los mensajes a gran velocidad como en el caso del periodista Ricardo Alemán.
