El empresario Ricardo Salinas Pliego, considerado como uno de los hombres más ricos de México, ha sido señalado en reiteradas ocasiones por la manera en la que ha mostrado su falta de empatía ante la crisis económica y de salud que padece tanto el país como el mundo, siendo uno de los empresarios que obligó a sus trabajadores a seguir acudiendo a las labores presenciales, pese a que las autoridades federales únicamente habían solicitado que se abrieran espacios no esenciales.
El dueño de Grupo Salinas que aglutina a Tv Azteca y a Banco Azteca y Elektra no sólo no ha sido receptivo para recibir las denuncias de sus propios trabajadores, sino que también ha desafiado abiertamente al gobierno federal al mantener abiertas sus sucursales cuando la pandemia estaba comenzando, aunado a que denostó y minimizó los efectos reales del Covid-19.
El empresario informó hace unas semanas que dio positivo a la nueva cepa viral, pero nuevamente minimizó sus efectos al afirmar que sólo se trató de un problema que le causó síntomas similares a los de una gripe común, pese a que a nivel mundial ha causado la muerte de casi un millón de personas.
Muchas de las sucursales de Elektra y Banco Azteca no respetaron las medidas sanitarias, por lo que exponían tanto a los trabajadores como al público en general que acude a las mismas, siendo también una de las empresas que no ha adoptado medidas acordes a las necesidades de miles de personas que padecen condiciones críticas a consecuencia del desempleo.
Pero la manera poco empática en la que ha Salinas Pliego ha manifestado su escaso interés legítimo por los demás no se compara en la manera en la que de forma grosera ha intentado evitar pagar sus impuestos, buscando amparos y recursos legales para esquivar su obligación como persona moral.
El polémico empresario adeuda más de 14 mil millones de pesos en impuestos retrasados que ha evadido del fisco federal durante las pasadas administraciones que perdonaron a los grandes empresarios condonándoles los impuestos que cualquier ciudadano está obligado a pagar.
Aunque se amparó, el tribunal ordenó al propietario de Tv Azteca pagar los impuestos retrasados que debe al Sistema de Administración Tributaria (SAT), por lo que a diferencia de los otros empresarios que concentran la riqueza nacional y fomentan la desigualdad, en el caso de Salinas Pliego se ha convertido en la imagen más señalada de esa burbuja que sólo la conforman el uno por ciento de la población.
La falsa filantropía que ha impulsado amparado al poder ha sido también otro aspecto cuestionable a un empresario que busca despojar a los más necesitados de lo que tienen con elevadas tasas impositivas, mientras que no es capaz de devolver al Estado todas las prebendas que le han permitido colocarse en la cima de la desigualdad social nacional.