Estela Garrido / @StelaGarrido3_0
Para Enrique Peña Nieto, la justicia a los deudos de la tragedia en la Guardería ABC sólo vale si es mediática.
La tarde de este 5 de junio, el Ejecutivo federal envió dos tuits para expresar su “solidaridad” con las víctimas del incendio de hace cuatro años en Hermosillo, Sonora, donde murieron 49 niños.
“A 4 años de distancia, hoy recordamos a los niños afectados en el trágico accidente que enlutó a México #GuarderíaABC”, escribió Peña a las 15:04 horas, y adjuntó una fotografía de la bandera nacional a media asta en la residencia oficial de Los Pinos.
Enseguida, tuiteó: “Mi administración trabaja para apoyar a los pequeños y a las familias afectadas, con quienes hoy especialmente, refrendo mi solidaridad”.
Sin embargo, sus palabras se leen huecas a 12 meses de que se comprometió a hacer justicia a los niños y padres afectados, quienes han acusado indolencia y omisión de parte del priista.
De acuerdo con videos que circulan en YouTube, el 19 de junio del 2012, como candidato presidencial del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Peña Nieto se reunió con los padres de la Guardería ABC y se comprometió a mantener la atención médica para los lesionados e iniciar una investigación legal que determine culpables.
“He escuchado las peticiones que sintetizan muy bien la demanda de que se aplique justicia y de que la PGR realmente se ocupe hasta el final de deslindar las debidas responsabilidades”, mencionó Peña aquel día, cuando estuvo acompañado por el ex gobernador de Sonora y actualmente diputado federal Manlio Fabio Beltrones.
Pero el cumplimiento de las promesas sigue sin formar parte de la agenda del funcionario: hasta hoy, 5 de junio, la Procuraduría General de la República (PGR) tiene abierta una nueva investigación legal, pero sin resultados, pese a que los padres y el movimiento Manos Unidas han señalado que el incendio en la escuela de sus hijos se habría inducido para destruir documentación que evidenciaba un desvío de 10 mil millones de pesos del erario durante la gestión del entonces gobernador de Sonora, Eduardo Bours.
Luego, Peña continuó: “En segundo [compromiso], la atención debida por parte del IMSS a los niños que resultaron con lesiones, que aunque algunas no sean visibles, deben ser atendidas. Entiendo que un decreto del 2010 establece por parte del gobierno algunos derechos y alguna atención obligada por parte del Seguro Social, y entiendo lo de la falta reconocimiento a niños que todavía tienen lesiones”.
Al respecto, una de las madres de las víctimas fallecidas, Olga Ochoa, aseguró que la atención médica por parte del Instituto Mexicano del Servicio Social (IMSS) a los niños que resultaron lesionados ha sido interrumpida.
“Los padres batallan para que les den el servicio en tiempo y forma y ahora que entró la nueva administración nos argumentan que es por el cambio de la administración por lo que se están demorando en darnos el servicio. Ellos [los niños] no son culpables de lo que les pasó y lo mínimo que pueden hacer es darles en tiempo todo lo que necesiten”, contó Olga en entrevista para CNN México.
A pesar de lo prometido y firmado durante la campaña, las fallas en la atención médica continúan. También persiste la falta de compromiso para esclarecer las causas del incendio y castigar a los culpables de la tragedia infantil.